Conducción peligrosa

En el marco de la guerra de pareja, el veterinario Claudio Martínez Eyherabide protagonizó unos meses atrás un incidente tan curioso como temerario frente a la puerta de la Jefatura de la Unidad Regional XVII. Y uno de los protagonistas involuntarios del suceso fue un oficial de esa departamental sanlorencina, que casi terminó atropellado por el veterinario en su alocada carrera por escapar de su perseguidor, el marido de la actual pareja del profesional.

Al parecer, la historia de Martínez y su ex mujer está cargada de citas clandestinas e infidelidades a la vista de numerosos vecinos de San Lorenzo. Según contaron testigos, un mediodía de hace seis meses, el veterinario iba con una mujer en su Chevrolet Lux, sin saber que sus movimientos eran seguidos desde otro auto por su esposa y el hombre engañado.

Cuando Martínez Eyherabide divisó al perseguidor, aceleró y emprendió una presurosa marcha. Entonces, los dos automovilistas emprendieron una picada vertiginosa. Enfilaron por calle Urquiza y el paso de los vehículos fue divisado por un comisario de alto rango que les indicó que disminuyeran la velocidad.

Entonces, Martínez giró y casi atravesó la puerta de la Jefatura. De milagro no se llevó por delante al uniformado. "Discúlpeme, pero tenía miedo de que me mataran. Por eso corrí", dijo el veterinario cuando el oficial le recriminó su conducta.

En ese momento, el hombre le explicó al comisario su realidad de desencuentros sentimentales. "No soy ante quién debe hacer el descargo", le respondió el oficial. A raíz del incidente, Martínez Eyherabide y su rival afectivo terminaron demorados e imputados de conducción peligrosa.