Una pena

A Central le faltó decisión y se quedó sin nada

El Canalla perdió 3 a 1 con San Lorenzo

Gustavo Conti / Ovación

Pretende ser ordenado. Demuestra que hay un mensaje que se interpreta, pero no lo logra decodificar en acciones constantes. Y así da a entender que sabe de qué se trata, pero no siempre cómo hacerlo. Por eso los vaivenes. Por eso amaga con entusiasmar, a veces consolida esa sensación y otras, como anoche, la deja sólo en eso. Central no tuvo constancia, le faltó convencimiento y el punch indispensable. Dejó pasar la chance de asentar el momento promisorio que traía y San Lorenzo no se lo perdonó.

Este Central de Gorosito parece saber a qué juega. No improvisa posiciones, se maneja con libreto conocido y hasta transmite sentirse cómodo. Una defensa tradicional, un mediocampo con enganche definido (no se puede esperar otra cosa del técnico) y dos puntas movedizos, sobre todo Ruben. La receta le sienta a este plantel y trata de progresar en consecuencia, pero no siempre lo logra y se expone. Así, cuando San Lorenzo se acomodó y dejó de regalar tácticamente con la posición de Silvera (ver aparte) le dio un fuerte dolor de cabeza.

Tanteó el equipo de Ruggeri, contraatacó Central. Así se fueron los minutos y después parecieron anularse mutuamente. Desde un remate de Silvera, hasta una aproximación de Ruben que conjuró Saja pasó casi media hora sin que se hicieran cosquillas. San Lorenzo paró tres en el fondo pero cubrió mejor la izquierda que la derecha. Por eso fue difícil entender cómo Villagra no se animó a proyectarse más o juntarse con el Kily González, teniendo en cuenta que la única oposición era un deslucido Hirsig.

Recién al final de la etapa otro disparo de González que tapó Saja y el contraataque que disipó Ojeda a Rivero calentaron el frío en el Nuevo Gasómetro.

Pero en el inicio del complemento Ruggeri sacó a Jiménez por Darío Bottinelli y rápidamente sacó dividendos. Lavezzi desnudó las carencias de Azconzábal, mandó un centro pasado que Silvera volvió a meter al medio para la entrada goleadora de Darío Bottinelli.

La conquista alertó a Central, que entendió que no alcanza sólo con querer y le imprimió más decisión a su ofensiva. Le dio tan rápido resultado que fue una lástima que ni ahí se convenciera de que ese era el camino. Recuperó Villagra, cedió a Borzani, devolución al vacío, centro al área y cabezazo notable de Ruben.

Era el momento, Villagra casi hace el segundo y hasta Conca amagó con meterse en clima, pero Gorosito decidió que ya había pasado su cuarto de hora, puso a Di María y Central volvió a sus vacilaciones. El Kity no pasó más y de a poco la pelota volvió a los pies de Rivero, Lavezzi y cía. Entonces, el Pocho habilitó a Silvera entre los centrales canallas y el Cuqui definió ante Ojeda.

La nueva ventaja local sepultó a Central, lo obnubiló y Silvera volvió a hacerle un nudo a Azconzábal para tocar sobre la cabeza de Ojeda y sellar un resultado exagerado, pero que premió al más decidido. O al menos indeciso de los dos.

El Kily saca el disparo pese a la marca de Rivero.