Catamarca: un pueblo entre montañas

El Rodeo es el lugar indicado para el descanso. Paseos y excursiones por pintorescos rincones serranos

El Rodeo es una tradicional villa veraniega rodeada por los altos cordones de Ambato, uno de los más bellos paisajes de Catamarca. El pueblo está formado por chalecitos que se levantan en terrenos ondulados, surcados por cauces de agua y a 1.275 metros sobre el nivel del mar, lo cual asegura frescas noches aun durante el verano. Su nombre indica "lugar donde se reúne el ganado".

La villa es un tradicional lugar de descanso en Catamarca y además de casitas, ofrece hosterías y lugares donde acampar. Desde allí se realizan numerosos paseos por los alrededores y excursiones a caballo a los pintorescos rincones serranos de las cercanías.

En el siglo XVIII, las tierras de El Rodeo formaron parte de la vasta estancia "San José de Ambato" que llegaba hasta Singuil y las cumbres del Ambato, propiedad de don Francisco Cubas y Palacios, fundador de la tradicional familia Cubas en Catamarca.

Este microclima fresco y agradable en verano, por su proximidad a la ciudad capital, atrae a numerosos turistas, ofreciendo buena pesca, cabalgatas, baños en arroyos y piletas, múltiples paseos, y sobre todo, animadísimas fiestas nocturnas en enero y febrero. Festivales de verano se realizan por las noches, en distintos centros donde se presentan conjuntos de música popular, moderna y folclórica, que actúan hasta el amanecer.

Los visitantes que decidan pasar unos días en El Rodeo y que sean amantes de la naturaleza y la aventura, este lugar es el indicado para realizar trekking por el río Los Nogales. Este es un río donde se forman grandes cajones de agua, ideal para bañarse y pescar truchas. La vegetación se torna selvática a medida que se busca su nacimiento. A las 2 ó 3 horas de caminata se llega al Nogal Marcado que cuenta con 250 años. En una hora más se llega al Bañadero de los Cóndores.

Para realizar caminatas por el Cordón de Ambato se asciende hasta los 1500 metros de altura, y se llega a una lomada verde desde donde se dominan imponentes vistas del cordón. También se pueden avistar cóndores. El regreso es por la parte posterior del cerro desembocando en el río Ambato por el cual se regresa al pueblo. En este lugar también se pueden realizar cabalgatas por las cumbres que rodean la villa desde donde se alcanzan vistas panorámicas de todo el cordón.

Ya ubicados en El Rodeo, muchas son las actividades que se pueden realizar. Para los que gusten de la aventura, los más avezados podrán incursionar en el andinismo en nevados superiores a los 6.000 metros como el volcán de La Alumbrera, o bien realizar caminatas y paseos a caballo por la cordillera y precordillera.

También vale realizar una visita al Museo Presbítero Baudillo Vásquez, fundado en 1980 con el apoyo de la comunidad de Fuerte Quemado, que reúne una colección de piezas pertenecientes al arte precolombino y una reserva natural inigualable, testimonio de los últimos diez mil años de historia.

Para los que gusten del turismo arqueológico, podrán visitar Pucará del Aconquija, de La Alumbrera, las ruinas de Coyparcito, petroglifos del Valle de Antofagasta de la Sierra, las ruinas indígenas en Laguna Blanca y en las quebradas de El Toro y El Potrero, así como Pueblo Perdido de la Quebrada.

También esta zona cuenta con los balnearios termales de Tinogasta, Fiambalá y de los faldeos de la sierra de Hualfin, y para los amantes de la pesca y de la caza, pueden acercarse a ríos y lagunas para pescar pejerreyes y salmónidos, o bien cazar pecaríes.

Una buena opción es realizar una visita a San Fernando del Valle de Catamarca, una capital con estilo colonial. Frente a su plaza central, se encuentra la Casa de Gobierno y la basílica Nuestra Señora del Valle. Otros lugares interesantes son el Museo de Bellas Artes y el folclórico , ilustrativo de las tradiciones catamarqueñas.