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sábado,
22 de
julio de
2006 |
Escándalo. Por "sugerencia" oficial, los frigoríficos se retiraron del mercado de Liniers
En un clima de tensión, arrancó el primer paro ruralista al gobierno
Los productores nucleados en CRA denunciaron medidas de presión y hoy se movilizarán en Córdoba
Los frigoríficos protagonizaron ayer un hecho inédito en el Mercado de Liniers al retirarse masivamente de la compra de hacienda. La medida, que según consignatarios y productores obedece a la presión que ejerció el gobierno sobre esas empresas, atizó el enfrentamiento con los ruralistas que hoy largaron el primer paro agropecuario de la era K.
El presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías, aseguró que las maniobras como las ocurridas ayer en Liniers constituyen un síntoma de la preocupación del gobierno por la medida de fuerza, lo cual es un indicador de su éxito. La entidad convocó a un paro que se extenderá hasta el martes, en reclamo de un cambio en la política agropecuaria oficial, y que será acompañado por una serie de movilizaciones que comenzarán hoy en la provincia de Córdoba.
La decisión de los ruralistas recibió en las últimas horas muestras de solidaridad de otras entidades del sector de agronegocios, como las que integran la cadena agroindustrial. En este caso, sin embargo, el apoyo se matizó con llamados a "la madurez" de las entidades gremiales y un pedido para que "la excepcionalidad de la protesta no lleve a la interrupción del diálogo con las autoridades".
Desde otro ángulo, la Federación Agraria Argentina lanzó su propio plan de lucha, aunque se diferenció de CRA. Sus afiliados en Córdoba y Entre Ríos participarán de las medidas de protesta que se inician hoy, así como el Movimiento de Mujeres en Lucha, aunque en este caso aclararon que lo harán con su propia agenda que incluye una mayor intervención estatal a favor de los pequeños y medianos productores.
La hacienda sin vender
Más allá de los resultados de la protesta, lo que es cierto es que el paro de CRA logró revolver el ambiente político relacionado con la agroindustria. Prueba de ello fue el inédito retiro que protagonizaron ayer los compradores habituales de hacienda en el Mercado de Liniers.
Los 12.482 bovinos que ingresaron ayer al ente concentrador representaron ya de por sí un ingreso con poco precedentes para el último día de la semana. Pero más curioso fue el retiro masivo de los compradores, con excepción de un frigorífico concursado.
Consignatarios tradicionales de Liniers dijeron que los productores fueron "presionados" para enviar hacienda, del mismo modo que los empresarios frigoríficos recibieron "sugerencias" para no comprar animales, de parte de funcionarios del gobierno.
De este modo, las autoridades buscan neutralizar una potencial parálisis del mercado el lunes próximo, como consecuencia del no envío de hacienda. Con el volumen de vacunos que quedó en el ente concentrador, "el gobierno podrá decir que el paro fracasó, ya que el lunes habrá tropas" distribuidas en los corrales de Liniers.
La medida implica un riesgo sanitario ya que las tropas deberán permanecer hasta el lunes en los corrales del mercado, desbordando la capacidad y la provisión de alimentos. "Muchos animales perderán peso, otros morirán y, en cualquiera de los dos casos, la situación se traducirá en fuertes quebrantos para los productores", señalaron operadores de esa plaza concentradora.
Durante una conferencia de prensa que ofreció en la exposición rural de Palermo, Llambías no descartó que la entidad inicie acciones penales por lo sucedido en Liniers. "Se intimidó a productores para que enviaran hacienda y alos frigoríficos para que no compren vacunos", dijo el presidente de CRA.
La Asociación de Productores de Carne Bovina Argentina (Aprocaboa) expresó también su preocupación por "las irregularidades que ocurrieron en el Mercado de Liniers" y por "la prohibición de faenar" durante el día de hoy.
En el mercado ganadero de Rosario la operatoria fue normal. Sin embargo, fuentes del sector señalaron que los frigoríficos fueron advertidos de que no recibirán la autorización para faenarlos durante el día de hoy.
Fuentes de los consignatarios de Liniers señalaron que las "sugerencias" realizadas a los empresarios frigoríficos para no comprar hacienda incluyeron distintas maneras de presión, como la reducción de asignaciones de cuota Hilton e inspecciones de la Afip.
Pero lo cierto es que la industria procesadora de productos agropecuarios había sido también blanco en los últimos días de duras críticas por parte de dirigentes ruralistas. El argumento es que las intervenciones en el mercado habían posibilitado grandes transferencias de recursos desde el sector primario al manufacturero.
El presidente de CRA abundó sobre ello ayer, al referirse a la marcha atrás que dio el presidente Néstor Kirchner respecto de la reducción de las retenciones a las exportaciones lácteas. La prórroga de esos impuestos por 60 días fue interpretada como la primera medida del gobierno contra el paro, pero Llambías le agregó otra dimensión: "También jugó en contra la posición de la industria láctea, cuyos directivos optaron por no acordar que se modifique esa medida restrictiva", dijo.
Las asociaciones que nuclean a los productores tamberos expresaron abiertamente su apoyo a las medidas de fuerza. El paro de los ruralista incluirá movilizaciones, asambleas y entrega de petitorios a autoridades provinciales. Hoy se espera una importante concentración en la localidad cordobesa de Jesús María, mientras que el lunes habrá marchas en toda la provincia de Buenos Aires.
Para ese día, en el que se debería sentir el efecto de la protesta, el presidente Néstor Kirchner también anticipó su jugada: convocó a una reunión para anunciar el plan ganadero nacional.
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Los corrales de Liniers se llenaron de hacienda ante la falta de compradores.
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