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 miércoles, 05 de julio de 2006  
"Yo no la maté", aseguró el menor preso por el homicidio de su novia
Le imputan la muerte de Leticia Repetto, ocurrida en mayo en Cabín 9. Acusó a su padrino, también detenido

Luciano F., el novio de la adolescente de 16 años que en mayo pasado apareció asesinada de dos balazos en el barrio Cabín 9, exclamó su inocencia al declarar en un juzgado de Menores. "Yo no la maté", aseguró llorando ante las dos funcionarias judiciales que escucharon su relato.

Luciano F. fue detenido el 27 de junio pasado en una casa de Felipe Moré al 3800. Por el crimen de la chica ya estaba detenido Salvador Cuffaro, un ex policía de 62 años y padrino del muchacho, en cuya casa se desató la tragedia.

El último domingo de abril Leticia y Luciano fueron vistos frente a la puerta de la casa de ella, en la zona oeste de la ciudad. Después se marcharon, presuntamente con destino a la casa de Cuffaro. Al pasar las horas y no saber nada de la adolescente, su mamá, Nélida Ramona Repetto, se desesperó y empezó a buscarla por todos lados. Llamó al celular de su hija y, según ella misma contó a La Capital, la "atendió una mujer que cortó sin decir palabra".

El tiempo transcurrió y, ante la falta de respuestas, Nélida radicó la denuncia por averiguación de paradero en la subcomisaría 18ª. Así pasaron unas 72 horas hasta que la mañana del miércoles 3 de mayo el cuerpo de la jovencita apareció tirado a un costado de la calle Chajá, a unos 20 metros de las vías férreas y a unas ocho cuadras de su casa.

Ayer ante la secretaria del Juzgado de Menores Nº3 y la fiscal Elida Rivoira, Luciano reconstruyó el suceso. Según contó un allegado a la causa, Luciano dijo que la madrugada del 3 de mayo él estaba durmiendo junto a Leticia en la casa de Cuffaro cuando la chica "se despertó diciendo que tenía sed". Somnoliento, el muchacho le indicó que fuera a la cocina a "tomar agua".


"¿Qué hiciste?"
En ese momento, el joven escuchó cinco detonaciones de arma de fuego. Las estampidas, según dijo, lo sobresaltaron. Cuando se despertó distinguió a Cuffaro en la puerta de la habitación y a Leticia en el garaje de la casa, detrás de un auto. Estaba malherida, pero parada. Un rato después, Leticia se desplomó al suelo. En ese momento, Luciano le preguntó a su padrino: "¿Qué hiciste?". Y el ex policía le respondió: "Le tiré porque la confundí con un ladrón".

Entonces, Luciano la arrastró hasta la pieza para socorrerla. En el cuarto, según dijo, le pidió a su padrino que llamaran a una ambulancia, pero Cuffaro se negó a hacerlo. En cambio, el hombre propuso conducirla a un sitio que no le precisó a Luciano F.

"Mi padrino decidió llevarla en un auto y yo lo ayudé a subirla, pero no fui. Me quedé en la casa", contó el joven. A partir de ese momento, la policía comenzó a buscar a Luciano hasta localizarlo un mes y medio en casa de sus familiares. Ayer, ante la Justicia, el adolescente manifestó que allegados a Cuffaro lo atemorizaron para que continuara como fugitivo. "Me dijeron que me iban a dar (condena) perpetua y que si la policía me agarraba me iban a matar", comentó. Y dijo que las mismas personas lo llevaron a una casa de Villa Gobernador Gálvez, donde permaneció algunos días. En todo ese tiempo, según dijo, le impidieron tomar contacto con los familiares de Leticia para brindar su versión del suceso.

Antes de la detención de Luciano, la mamá de Leticia había pedido a la policía que localizara a Luciano. "Queremos que se entregue y cuente por qué le hizo esto a mi hija", había reclamado la mujer.

Sin embargo, quien primero se entregó ante la otra jueza que investiga el hecho, Alejandra Rodenas, fue Salvador Cuffaro. El policía retirado sostuvo que Leticia y Luciano habían ido a su casa, que se habían quedado a dormir allí un par de noches y que él le había "disparado por error" al "ver un bulto" frente a su pieza y "confundirla" con un ladrón.

A los investigadores no les pareció verosímil esta versión ya que los dos balazos que terminaron con la vida de Leticia salieron disparados de un revólver calibre 38 y, según dijeron los pesquisas, "es imposible hablar de disparos accidentales cuando se habla de ese tipo de armas".
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