Andamios en alerta. A las empresas que llevan adelante el Plan Federal de Viviendas le adeudan 11 millones de pesos a marzo

Más suspensiones de obreros que construyen viviendas sociales

Es por atrasos en el pago de certificados de obra. En el sur provincial prescindieron de 1.500 en los últimos 2 meses

En los últimos 2 meses al menos 1.500 obreros fueron suspendidos en el sur de la provincia por las empresas que están llevando adelante el Plan Federal de Viviendas. Las constructoras todavía no cobraron los certificados de obras de marzo, que ascienden a unos 11 millones de pesos, lo que les generó inconvenientes en los pagos a proveedores y los llevó a reducir el personal. Desde el sector solicitaron al gobierno provincial que afronte esta mora con sus propios recursos y luego gestione el envío de fondos desde la Nación, estamento responsable de girar el dinero. Pero hasta el momento no hay respuestas concretas, las constructoras comenzaron a reducir el ritmo de las obras y los despidos de obreros podrían incrementarse si no hay una solución en el corto plazo.

La situación es de la tal magnitud que disparó ayer una reunión de la que participaron los representantes de las 25 empresas que están llevando adelante el Plan Federal de Viviendas en la zona sur de Santa Fe.

En el cónclave, donde más de un empresario se mostró ofuscado, se analizó el delicado panorama que están atravesando las empresas ante el incumplimiento del pago de los certificados de obra de marzo.

"Lo que reclamamos es que la provincia afronte este atraso de los fondos que envía la Nación. Hay lugares como San Juan, Entre Ríos y Córdoba donde fueron sensibles a esta situación. Entendieron que sólo de ese modo se evitaba que las obras no se paralizaran y no se perdieran fuentes de trabajo", disparó el presidente de la delegación Rosario de la Cámara Argentina de la Construcción, Gustavo Gardebled.

A renglón seguido, destacó que en Santa Fe "falta decisión política. La provincia logró que se construyera en suelo santafesino el 8 por ciento de las viviendas del Plan Federal, pero ahora no toma la decisión de adelantar los fondos que debe la Nación para evitar los problemas sociales que esta situación está trayendo", indicó el empresario.

El Plan Federal de Viviendas está instrumentado desde la Nación, instancia desde el cual se giran los fondos para abonar los certificados de obra, que vencen a los 60 días.

Ese pago se canaliza "vía provincia", pero hasta el momento aún no llegaron los fondos para abonar los certificados de marzo. Se trata de 11 millones de pesos que, al no estar a disposición, generan inconvenientes en las empresas a la hora de hacer frente al pago de proveedores y empleados.


Menos mano de obra
Por el momento, la solución de las constructoras fue ir reduciendo el ritmo de obra y la cantidad de personal. Sólo en el sur de la provincia ya hay al menos 1.500 obreros que debieron ser suspendidos.

La situación encendió una luz de alerta en el seno de la delegación local de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra). Es más, el 21 de este mes, el gremio presentó un escrito en la Gobernación advirtiendo que "de seguir las demoras en el pago desde la Nación a las empresas constructoras, se paralizarán las obras". En ese contexto, hace unos días, el secretario general de la Uocra local, Oscar Astrada, disparó: "Este es un grave problema, tememos más despidos y suspensiones".

Desde las constructoras, en tanto, no sólo apelaron a la reducción del ritmo de obra y de personal como solución para afrontar la mora en los pagos. Los empresarios también solicitarán que se reconsideren los plazos de ejecución de las viviendas.

La versión oficial en torno a los por qué de los atrasos en los pagos apuntaron a "cambios administrativos" que se instrumentaron desde la Nación. "Antes los pagos los autorizaba el secretario de Obras Públicas de la Nación, pero ahora la función la realizará el secretario de Vivienda", explicó el secretario de Obras Públicas provincial, Edgardo Fiol.

A entender del funcionario, este cambio hará las cosas "más ágiles", pero hasta el momento la situación se presenta lejana a encausarse y crispa los ánimos de los empresarios.

Es más, la preocupación del sector va más allá del atraso en los pagos y se fija también en la "ausencia total" de un cronograma que dé "claras certezas de cómo se irán abonando los certificados de obra".

En toda la provincia son cerca de 60 las empresas que están abocadas a la construcción de casas en el marco del Plan Federal de Viviendas. De ese total, unas 25 desarrollan su labor en el sur de la provincia.

El convenio firmado entre el Ministerio de Planificación Federal y las provincias no precisa plazo de ejecución. Sólo establece que tras la culminación de las obras, se adjudiquen en un plazo de dos meses y se escrituren no más allá de seis meses de adjudicadas.

Con esta demoras, las empresas advirtieron que seguirán reduciendo tanto el ritmo de obra como el personal, con el consiguiente conflicto social que esto último implica.

El 8% de las casas a construirse en el país son para Santa Fe.