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| domingo,
19 de
marzo de
2006 |
| Edición Matutina |
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Autoestima, el techo de cristal
Los cambios sociales producidos en las últimas décadas han generado cambios en la psicología femenina, respecto de los antiguos modelos de dependencia y sumisión. Pero el "techo de cristal", según afirman algunos especialistas, aún persiste.
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Cocina: día de ñoquis
Mi querida amiga, Eduardo Grecco, un psicólogo amigo, autor de muchos libros, que viaja por todo el mundo enseñando a vivir mejor, decía: "Relaciones tormentosas ¿hay otras?, todas las relaciones las tenemos merecidas. No como castigo, sino porque el otro, con quien nos encontramos, es un espejo donde vemos reflejado algo de nosotros mismos que ignoramos. De modo que aun en esas relaciones tormentosas, esas que nos rompen el corazón, hay mucho que aprender. Y es por eso que debemos pensar a las penas de amor como una oportunidad de aprendizaje que el destino le ofrece al hombre para que pueda crecer y avanzar hacia su individuación. Recordemos que lo que no se aprende se repite, por eso, si huimos de una relación tormentosa sin vivirla intensamente y sin aprender lo que ella tiene que enseñarnos, seguramente, en un tiempo, volveremos a encontrarnos en el mismo lugar pero sufriendo aún más".
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El arte de las odaliscas
Las danzas árabes son un arte de baile relacionado a los pueblos que tienen este idioma como lengua materna. Su origen es egipcio y data de 3000 años AC.
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El valor oculto de los números
Los números manejan el Universo. Nacemos un día, de determinado mes, de tal año y a cierta hora (todos son números). Vivimos en un domicilio conformado por números. Llevamos un registro de los años que tenemos.
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Energía y emociones
Aquellos que están inmersos en actividades o disciplinas orientales como el Reiki, Yoga o Tai Chi Chuan saben del sentido que se le otorga a la palabra energía.
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Interiores: desbordes
Los bordes constituyen una línea real o virtual, un límite, una superficie, en suma un recorrido posible, o en ocasiones imposible de recorrer.
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Trastornos emocionales de los hijos
Los desajustes infantiles de orden emocional no se deben sólo a los niños, sino que envuelven también a los padres. Así es como detrás de niños nerviosos, egoístas, inaguantables, abúlicos o agresivos, puede haber padres muy ocupados, indiferentes o fríos ante los problemas planteados por los hijos.
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La Ciudad
