Costo de vida. El gobierno reparte ahora las culpas entre el complot de los súper y la falta de inversión

El supermercadista Coto pidió que no se dramatice la inflación de septiembre

Desde Salta, donde se realiza el precoloquio de Idea, dijo que los aumentos "están dentro de la lógica"

El supermercadista Alfredo Coto consideró que la inflación es producto de la actividad económica y está dentro de las pautas establecidas del 10% y pidió "no dramatizar" con el tema, luego de que el gobierno acusara al sector de generar alzas injustificadas de precios en los alimentos.

"La inflación es producto de la actividad económica, si está dentro de las pautas establecidas del 10%, estamos más o menos dentro de la lógica", dijo desde Salta, donde presidió el precoloquio empresarial de Idea. El supermercadista se atajó de las críticas presidenciales al asegurar que la inflación obedece a que "hay un crecimiento espectacular" de la economía y que "a nadie le gusta la inflación".

Como lo dijo el ministro de Economía, Roberto Lavagna, el titular de la cadena Coto, condicionó el freno a los precios al aumento de la inversión y aseguró: "Los empresarios estamos trabajando muy fuerte acompañando el gobierno".

Sobre el índice de inflación de setiembre que arrojó un 1,2%, dijo: "No hay que dramatizar, nosotros tenemos el excedente de la balanza de pagos a nuestro favor, estamos exportando más de lo que importamos, no hay déficit fiscal, la macro va bien, aunque faltan muchas cosas por hacer".

El avance de la inflación y la necesidad de inversiones para mejorar el nivel de productividad de las empresas encabezaron la agenda de discusión de los 300 empresarios de primera línea que participaron en Salta del Precoloquio NOA organizado por el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (idea).

Si bien el temario oficial del encuentro hizo hincapié en las economías regionales, las denuncias del presidente Néstor Kirchner sobre un complot desestabilizador organizado por algunos grupos económicos, dominaron las charlas informales de los ejecutivos.

De todos modos, voceros del gobierno comenzaron a bajarle el tono a la arremetida kirchnerista. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, atribuyó ayer la suba de los precios a "una serie de causas", que en algunos casos obedecer a "una cierta distorsión" de los supermercados y en otros a la falta de inversiones.

Fernández desestimó que haya contradicciones entre las afirmaciones del presidente Néstor Kirchner, que culpa a los supermercados del alza de la inflación, y los dichos de Lavagna, quien aseguró que la "solución de fondo" contra el aumento de precios son las inversiones.

El economista Héctor Valle se alineó con el presidente y dijo que los supermercados "pretenden niveles de rentabilidad que son muy difíciles de sostener en estos momentos". Involucró también al "oligopolio" de los fabricantes de envases de los alimentos y otros insumos en el grupo de sectores que "provocó un aumento importante de los precios mayoristas el año pasado y que ahora se refleja en los precios al consumidor".

Para Eduardo Curia, después de las elecciones el gobierno deberá tomar medidas que "achiquen la brecha entre precios mayoristas y minoristas".El foco, dijo, debe estar puesto en la evolución de la "comercialización, distribución o los alquileres de locales, que están impulsando al alza los precios al consumidor".

En tanto, Orlando Ferreres defendió a los supermercadistas, que "tienen un margen de ganancia mínimo, que oscila entre el 1 y 1,5%" y, por lo tanto "no pueden ser ellos los que hagan aumentos importantes del precio final".

La titular de la Asociación de Defensa del Consumidor (Adelco), Ana María Luro, atribuyó el problema inflacionario a una caída en la producción de alimentos, por lo cual pidió que el gobierno aplique políticas de "mayor aliento a las inversiones" para aumentar la oferta.

"Se armó un cuello de botella que no se termina de dilucidar", indicó Luro, al tiempo que remarcó que "si hubo un mayor aumento en mayoristas que en minoristas, está claro que hay una presión de la parte productiva con relación al comercio, por lo tanto tienen que subir los precios".

Enrique Pescarmona, presidente de Idea, descartó desde Salta que los supermercados se cartelicen para subir los precios. "La competencia por los clientes entre los supermercados es a las piñas y brutal, por ello no creo que estén remarcando las distintas cadenas".

Oscar Vicente, de Petrobras, minimizó la inflación minorista de septiembre porque, consideró, "obedece al cambio en los precios relativos". Y se mostró de acuerdo con las explicaciones dadas por el Ministerio de Economía: "Ya se explicó técnicamente que existieron factores de temporalidad que se deben tener en cuenta".

Para el empresario petrolero, en 2006, "en la medida que crezca la economía", se logrará "frenar la suba de precios".

El empresario Alfredo Coto negó que el supermercadismo tenga culpa por la inflación.