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domingo,
02 de
octubre de
2005 |
Central busca afirmar la recuperación ante Racing
Gustavo Conti / La Capital
Central viene de sufrir una dolorosa eliminación de la Copa Sudamericana pero, paradójicamente, ganó en credibilidad, manifestada a través del reconocimiento generalizado. Si la historia de Brasil no se transforma en un mojón de la pálida realidad de los últimos tiempos, si es un emergente de un pasado no muy lejano y acentúa una tendencia en esa dirección, entonces este proceso seguirá adelante y se podrá creer en la consolidación. La primera prueba pos resurrección, ante un Racing que busca renovarse, no será fácil, es cierto, y además los auriazules darán ventajas físicas. Pero ahora que acomodó el "juego aéreo", como diría Zof, no es cuestión de desaprovecharlo. Hace tan sólo tres días, el equipo que pareció muerto y a punto de recibir un cachetazo para el nocaut, reaccionó al nivel de orillar una hazaña.
La cuestión pasa ahora por aprender la lección, por hacerse fuerte desde la convicción de que es posible regular en ese nivel y no caer en baches prolongados que le hagan mermar las expectativas y además lo lleve, como antes de jugar en Porto Alegre, hasta el extremo de pensar que no había mucho más por hacer. Central experimentó esa sensación en el Clausura pasado, donde el traje de protagonista resultó un saco de plomo y sólo pudo reaccionar cada vez que hubo coincidencia general de que iba de punto. Instituto al final de aquel campeonato, Boca en este, Newell's en el clásico de ida y ahora Inter.
Por supuesto, hay mucho mérito en esa circunstancia, pero para que realmente genere ilusiones firmes de ganar una pelea grande, debe perdurar en el tiempo y cuando se está en la cresta de la ola, adonde este equipo supo llegar.
Racing será esta tarde una buena medida, claro que no hay que dejar de hacer la salvedad de que su rival llegará más descansado. Pero Central está mejor de ánimo, porque el local viene mal pese a la inyección que supone el debut de Teté Quiroz en la conducción técnica, y porque se dio cuenta de que el potencial, ese que lo llevó a clasificar a las copas, a ser el segundo mejor equipo de la temporada pasada y ganarle a Newell's, no se desactivó. O mejor dicho, está para usarlo sin complejos.
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Fotos
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Cufarro Russo junto a Borzani y Vitti.
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