La Capital
Año CXXXVIII Nº 48889
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales



suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 25/09
Mujer 25/09
Economía 25/09
Señales 25/09
Salud 21/09

contacto
servicios
Institucional





 domingo, 02 de octubre de 2005  
candi
Charlas en el Café del Bajo
-Antes de proseguir con el tema iniciado ayer sobre el aborto, es menester una rectificación, Candi: El nombre de pila de la persona que envió la carta es Marité, no Marita como dijimos la víspera. Dicho esto continúo con la carta de la amiga Marité y con nuestras opiniones a propósito, sin que esto signifique, aclaro también, una confrontación con la amiga, a quien le respetamos su pensamiento. Sólo damos nuestra opinión sobre lo que ella ha expresado. "La despenalización y legalización del aborto -dice la lectora- no obliga a ninguna mujer a practicarlo, pero sí exige del Estado garantizar, proveer y cumplir con el asesoramiento y la prevención, así como proporcionar servicios médicos adecuados y gratuitos, sosteniendo y respetando a las mujeres y niñas que atraviesan estas decisiones".

-Segunda interrupción para formular las siguientes preguntas: ¿Decisiones fundadas en qué razones y respaldadas por cuáles estructuras morales y éticas? ¿En qué principios filosóficos y en cuáles atributos ajustados a derecho? Todo ello sin dejar de considerar, de manera taxativa, el inalienable y supremo derecho a la vida del ser que, aún carente de razón no está privado de sentido (como ha sido demostrado científicamente) ni de raíz congnitiva aun siendo ella inconsciente. Pregunto además: ¿Con qué conocimiento, sabiduría, capacidad de intelecto y nivel de conciencia puede adoptar una decisión trascendente, como la de la vida y la muerte, una pobre persona que no es capaz de discernir (porque el Estado y la dirigencia en general no se ocupó de enriquecer su intelecto), que el perejil lo único que podrá lograr es una tremenda infección que acabará con su vida? Siga con la carta de Marité.

-"Ahora bien -dice ella-, y en cuánto a vuestra pregunta: ¿la propia vida no es de por sí un paradigma? Claro que sí y hasta aplaudo la idea. Pero para que no quede ninguna duda, elijo rescatar y valorar al hombre-mujer real, el de carne y hueso, en definitiva rescatar los valores éticos y decisiones del humanismo. Bueno caballeros, se me ha hecho un poco tarde y mi familia me espera. Para la próxima: ustedes se manifiestan en contra del aborto "excepto en casos justificados". ¿Cuáles serían esos casos?"

-Bien, Marité pone el dedo en esa llaga que siempre poseyó este planteo filosófico: ¿El hombre real es sólo de carne y hueso? Pues, de veras que yo respeto todo su concepto sobre humanismo, pero para mí el humanismo no sólo que no se agota con la carne y el hueso, ni con el talento desarrollado mediante la acción del cerebro. Cada día me convenzo más de que ese es el primer paso de la humanidad del ser; una humanidad que, lejos de extinguirse, se hace grande y sublime cuando comienza a trasponer el mismo umbral de la materia. Pero ese umbral no puede ser traspasado en buena forma sino se cumple, primero, con el sagrado deber de respetar la existencia tangible y no tangible. Y en esto voy a San Pablo y reconozco que es cierto lo que dice respecto del corazón del ser humano: si no somos capaces de amar a nuestro prójimo, al que vemos (sentimos) ¿cómo podremos amar a Dios a quien no vemos? Es decir, si el hombre no es capaz de valorizarse a sí mismo en el plano físico, difícil le resultará aceptar el valor del nivel metafísico y hasta es posible que dude y niegue todo lo vinculado con la extensión espiritual ¿Y por qué digo esto? Porque si negamos la trascendencia del ser humano hacia niveles más altos que los puramente materiales, circunscribimos al feto (que se hace de espíritu en el mismo momento de la fecundación) a un rango muy inferior al de mascota. Y sostengo que muy inferior, porque no suele ser frecuente que la mascota no deseada sea eliminada. Por lo general posee la alternativa de la adopción por parte de otra persona, ventaja que no se concede en muchos casos al ser humano que lo es aún cuando no haya visto la luz.

--Se termina el espacio y muchos le han preguntado en qué casos justifica usted el aborto, porque aludió usted hace unos días a justificativos.

-Eso lo respondo mañana luego de leer la carta de Walter Lenzi, quien se ha manifestado en contra del aborto y sostuvo que al aceptar yo el aborto en ciertos casos he dejado peligrosamente entreabierta la puerta para que pasen los pro-abortistas y la abran del todo. No creo que sea así. Mañana hablo del tema y terminamos con esta cuestión.

Candi II

[email protected]

 Buscador ¡Nuevo!
Búsqueda avanzada Archivo



clima mas
Mín 9º - Máx 25º
nubosidad-variable.gif

la frase del día
"Binner tiene razón: del gobernador Obeid para abajo todos estuvieron conmigo"
Carlos Menem
Ex presidente de la Nación y candidato a senador
Ver noticia


tapa edición impresa


humor mas humor
ampliar

horoscopo mas
Libra - 23/09 al 23/10
horoscopo


         La Capital      Copyright 2003 | Todos los derechos reservados