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 domingo, 12 de diciembre de 2004  
Se pareció al último día de clases

La práctica que cumplieron ayer los jugadores de Newell's en los Bosques de Palermo se pareció mucho al último día de clases de un grupo de egresados. Bajo un clima de total armonía, reinaron las bromas, los manoseos bien entendidos durante el desarrollo del picado informal y como si esto no fuera suficiente para armonizar la puesta en escena, el Tolo Gallego lució más sociable y comunicativo que nunca. Durante un buen rato se sacó esa máscara de hombre enfrascado en su mundo y hasta mostró su ancha sonrisa para mezclarse entre los curiosos que se agolparon en el lugar para seguir las imágenes del inminente campeón del fútbol argentino.

El entrenador tampoco puso mala cara cuando un grupo de hinchas rojinegros le pidió que se sacara una foto con ellos en plena etapa de elongación de sus muchachos. Ah, en ese preciso instante también pasaron trotando los jugadores de River Maxi López y Alejandro Saccone y el grupo apenas atinó a desviar la vista. No hubo intención de saludo ni del Tolo, quien tuvo al rubio delantero en su paso por el banco millonario.

El otro detalle que le faltaba al entrenamiento para rotularlo de distendido lo pusieron la cantidad de medios periodísticos capitalinos (de Rosario sólo estaba Ovación) que se acercaron hasta Palermo para retratar o llevarse una nota con los jugadores rojinegros. Ni siquiera esta invasión mediática le mutó el semblante a Gallego. Todo lo contrario, hasta saludó a los dos cronistas de los móviles de Crónica TV y les tiró la lengua con su habitual sarcasmo: "Y ustedes que hacen acá. Mirá que en este grupo no hay quilombo, acá está todo bien", deslizó mientras enfilaba hacia el micro que trasladó a la delegación hasta el hotel céntrico donde está hospedada.

Marcelo Penta también hizo su aporte a la causa. El pibe, quien como se está recuperando de una luxación en un dedo del pie y hoy no jugará ni en reserva, ayer se la pasó filmando cada movimiento de sus compañeros con una camarita digital. Otro indicio inequívoco del compañerismo que existe en el seno de este plantel que golpea las puertas del paraíso. Un lazo afectivo que ayer se hizo más fuerte que nunca cuando el profe Jorge Fleitas, quizás apurando al destino, reunió sobre el final de la práctica a todos para que los reporteros gráficos presentes les sacaran la foto al campeón.
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El lesionado Marcelo Penta filmó todo.

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