Copa Davis: España casi lo grita

Moyá y Nadal le dieron una importante ventaja de 2-0 sobre Estados Unidos

España acaricia su segundo título en la Copa Davis tras un día soñado en el que Rafael Nadal derrotó al número dos del mundo para darle a su país una importante ventaja de 2-0 sobre Estados Unidos.

"Estoy emocionado...", confesó Nadal con la voz quebrada tras su 6/7 (6), 6/2, 7/6 (6) y 6/2 sobre Andy Roddick. Cuatro horas antes Carlos Moyá había puesto el 1-0 gracias a un claro 6/4, 6/2 y 6/3 sobre Mardy Fish.

Nadal, de 18 años y número 51 del mundo, cortó una racha de seis triunfos consecutivos de Roddick en los individuales de la Copa Davis, donde su última derrota se remontaba a febrero de 2003, ante el eslovaco Dominik Hrbaty.

Los 27.200 espectadores en el estadio sevillano de La Cartuja fueron parte importante del éxito de Nadal, cuya designación el jueves fue una sorpresa, ya que ocupaba el lugar del ex número uno del mundo Juan Carlos Ferrero.

El frío y la lluvia que vivió ayer Sevilla se atenuaron parcialmente con el calor del público, que disfrutó especialmente con el heroico partido de Nadal.

Las cosas no comenzaron tan bien para el joven español, que desperdició una ventaja de 5-2 en el tie break del primer set, jugado a un nivel y una intensidad superlativos. Roddick volvió a demostrar que es dueño de un servicio devastador, pero la clave del juego de Nadal fue precisamente la devolución.

El español se llevó el segundo set en apenas 34 minutos, sólo un descanso en la emoción que regresaría en un tercer parcial que tuvo todo lo que se espera en un choque por la Davis.

Roddick salvó dos set points sirviendo 5-6 y 15-40, mostrando toda la audacia y espectacularidad que es capaz de imprimirle a su tenis, y el tie break le dio una pelota de set al estadounidense. Nadal la salvó atacando, y poco después cerraría los 85 minutos de batalla del parcial con un passing-shot de revés tras un saque a 220 kilómetros por hora del norteamericano.

El banco español estaba eufórico. El capitán Jordi Arrese hablaba y hablaba a su jugador, tratando de que no perdiera fuerza ni motivación y de que los calambres del tercer set no regresaran. Roddick le hablaba y hablaba a su capitán, Patrick McEnroe, buscando explicaciones a lo que le sucedía.

No las encontró, y a las 18.27, Nadal caía de espaldas tras un revés largo de su rival que le daba el triunfo más importante de su corta carrera. El banco español se convirtió en un manojo de abrazos, sonrisas, saltos y alegría.

Moyá, número cinco del mundo, había dado el paso inicial sobreponiéndose a un comienzo frío y con nervios para arrasar a Fish tras una desventaja inicial de 3-0.

"Este fin de semana es muy importante para mí, llevo mucho tiempo preparándolo", dijo Moyá, visiblemente feliz tras el triunfo.

"Comencé un poquito nervioso", admitió el ex número uno del mundo. "Imagínate. La final más importante de mi vida, 26.000 personas... Estaba un poquito parado", añadió.

De los 117 minutos que necesitó para superar al número 37 del mundo, Moyá sólo sufrió realmente en los 15 primeros. Fish sorprendió con un juego veloz y preciso desde el primer punto, un saque ganador a 196 kilómetros por hora.

Pero el español encontró su juego, Fish perdió su estado de gracia y la enésima derecha flotante del estadounidense selló la derrota.

Nadal debe jugar hoy el punto de dobles junto a Tommy Robredo ante los hermanos Bob y Mike Bryan. Pese al cansancio acumulado tras tres horas y 38 minutos de juego, Arrese confirmó que será de la partida: "Seguro que Rafa estará mañana para jugar".

El capitán español estaba eufórico. "Hemos apostado fuerte por él el primer día, y no nos ha decepcionado nada. Seguramente será uno de los mejores jugadores de Copa Davis que pueda existir".

A España le alcanza un triunfo más para conquistar su segundo título en la Davis, tras el éxito de 2000 ante Australia. Estados Unidos debe ganar los próximos tres encuentros para llevarse por trigésimo segunda vez la ensaladera a casa.

Nadal acaba de lograr un gran triunfo.