Ariel Ortega no se recuperó de su "edema en el bicepsural izquierdo" y no estará ante River

¿Una ausencia que se preveía?

"Yo aconsejaría que no juegue", argumentó ayer el médico del plantel rojinegro Ignacio Astore

José M. Petunchi / La Capital

Ayer quedó confirmado la noticia que los hinchas de Newell's menos querían escuchar por estas horas: que Ariel Arnaldo Ortega no jugará mañana ante River. Sí, justamente ante el rival que los simpatizantes leprosos más hubiesen querido ver al Burrito con la camiseta rojinegra. No sólo por su aporte futbolístico, sino por lo que hubiera significado para todos su presencia. Pero tendrá que quedar para una próxima ocasión. "Yo aconsejaría que Ortega no juegue". La frase, que sonó con más contundencia que la habitual en Bella Vista, surgió de boca del médico del plantel Ignacio Astore, quien de esta manera fue el primero en admitir que el delantero no volverá al equipo titular mañana en el Monumental. Una información que después el Tolo Gallego admitió abiertamente, pero que se amparó en los dichos de Astore. Como se sabe, la resonancia que le realizaron el miércoles a Ortega arrojó "un edema en el bicepsural izquierdo".

Tal como venía la semana se presumía que iba a haber que esperar hasta el domingo para saber si el Burrito iba a estar ante el club de sus amores. No hubo que esperar mucho parque el misterio quedó develado. El primer indicio lo dio el propio jugador pese a que no quiso hablar cuando llegó al predio. Sin embargo, el hecho de que llegase en su vehículo particular, 10 minutos después que lo hiciera el plantel en el micro, entregó una aproximación que, rápidamente y mientras el grupo entrenaba, se encargó de ratificar el propio Astore.

En este marco, y como ya sucedió en los últimos días, hubo un sinfín de rumores. Desde un hipotético llamado del hombre fuerte de la AFA hasta las consabidas presiones que habría ejercido River para que no esté en este partido. Todos con poco sustento y, obviamente, sin la más mínima chance de confirmación.

Pero lo concreto es que el Burrito no estará. "Tiene algunos síntomas de molestias, está entrenando con normalidad y hace todos los trabajos como ustedes lo ven, pero en el trabajo de la explosividad, que es algo que él hace mucho durante los partidos, siente alguna incomodidad por el proceso inflamatorio que tiene en el bíceps", argumentó Astore, quien no quiere arriesgar a que el jugador pueda tener un desgarro ante un esfuerzo desmedido.

Y para justificar su recomendación, sentenció: "No es nada importante ni preocupante, pero uno corre el riesgo de que el jugador se desgarre, y si ocurre eso en vez de esperarlo 72 horas va a estar parado un mes".

Al margen de las versiones, lo concreto es que el Burrito no estará ante su ex club. Los hinchas de River agradecidos, los de Newell's con un dejo de desazón y desencanto.

El Burrito se quedó afuera.