La Capital
Año CXXXVII Nº 48521
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
Opinión
El Mundo
Escenario
La Región
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Campo
Educación


suplementos
ediciones anteriores
Salud 22/09
Autos 22/09
Turismo 19/09
Mujer 19/09
Economía 19/09
Señales 19/09


contacto


servicios

Institucional


 sábado, 25 de septiembre de 2004

candi
[email protected]

-Hoy el judaísmo celebra Yom Kippur, el Día del Perdón, pero antes de referirnos a ello, lo primero que voy a expresar es mi pedido de disculpas a la señora Adriana y al Instituto de Género, Derecho y Desarrollo y a todas aquellas damas que se hayan enojado por cuanto una nota aparecida aquí la semana pasada sobre la mujer produjo cierto descontento. Lamentamos que lo que para nosotros no pasó de ser una broma haya provocado esa molestia y por ello nuestro pedido de disculpas. En segundo lugar, y como siempre lo hemos hecho, reivindicamos a la mujer, a la que hemos reconocido y reconocemos su decisivo y fundamental rol protagónico en la sociedad.

-No pocas veces hemos puesto aquí como paradigmas a mujeres y sus actitudes. Cuando exaltamos la figura de María Magdalena a quien injustamente se la trató y trata de prostituta, con énfasis dijimos lo siguiente: "Como usted ve hay un fuerte espíritu patriarcal en la época, un machismo dominante que perdura aún hasta nuestros días, porque en el marco de la Iglesia la mujer sigue relegada a jerarquías inferiores. ¿Pero era este el pensamiento de Jesús? Personalmente creo que no". Hemos rendido homenaje a la mujer y hemos exaltado su rol, aún más significativo que el del propio hombre. Esto dijimos, por ejemplo, el año pasado: "Si debiera rendir un homenaje a todas las mujeres lo haría en una que es no sólo hermosa, sino abnegada, sacrificada, trabajadora, responsable y llena de amor, cuya tarea y cuyo rol difícilmente son valorados en toda su dimensión por nosotros: el ama de casa. Un trabajo silencioso por el hogar, por el esposo, por los hijos, un verdadero amor, una real entrega que a veces no recibe a cambio ni un simple te quiero. Nuestro homenaje a la mujer entonces en la figura de las jefas de hogar".

-Hemos destacado el papel de la mujer profesional, de la trabajadora y obviamente del ama de casa en general y en particular. En estas columnas hemos defendido los derechos de jóvenes, ancianos, hombres, mujeres, judíos, católicos, evangélicos, ateos, agnósticos sin distinción de razas, ni sexos, ni ideologías políticas o filosóficas, y hemos sostenido con énfasis los derechos de las minorías y de los más débiles.

-De manera tal que reivindicamos la figura y el rol de la mujer una vez más y nunca mejor que este día de Yom Kippur (Día del Perdón) que celebra la comunidad judía (y al que adherimos) para reiterar las disculpas si nos equivocamos o provocamos una molestia sin quererlo.

-Bueno, Yom Kippur es la fiesta solemne judía en donde el hombre se arrepiente de sus errores, pide perdón a Dios y a los hombres y se reconcilia con esa divinidad. Este es más o menos, resumido, el significado de esta celebración. Pero Yom Kippur (y un religioso judío podría decirlo con más autoridad, por cuanto esto es sólo una opinión) encierra también la exaltación de la humildad de corazón y es emblema de la lucha contra la soberbia, entre otros sentimientos poco felices como el resentimiento. Y voy a contar esta historia que no me pertenece: "El rabí Hahamán Ben Isaac llegó unos minutos tarde a una reunión y se sentó en la última fila de la sala. Otro de los rabinos que estaba en los primeros lugares se percató de su presencia y le dijo: venga aquí y tome un asiento más destacado, con nosotros. Un hombre de su saber no puede estar en la última fila". El rabí agradeció y le respondió que sería un honor compartir la primera fila y estar con ellos, pero dijo lo siguiente: "Estoy bien donde estoy. Después de todo, ¿no se nos enseñó que no es el lugar el que honra a la persona, sino la persona la que honra el lugar?". Después de decir esto el rabí Nahmán se sentó y todos los presentes entendieron que la humildad era su proclamación de grandeza". El Yom Kippur es un acercamiento a Dios y a los hombres a través de la humildad, despojándose el ser humano de todo aquello que lo lleva hacia una arrogancia que lo destruye y hacia vanidades que lo pierden. El rito del ayuno en Yom Kippur y de no usar ciertos atuendos que satisfacen los sentidos simboliza precisamente también, entre otras cosas, la entronización de una humildad que va al encuentro de la misericordia divina. De alguna manera Yom Kippur es estar dispuesto a sentarse en la última fila, reconocer errores y tener la disposición a un cambio. Es considerar que no puede haber arrepentimiento ni exaltación del hombre sin humildad, una humildad que se encuentra siempre con la piedad de Dios y de los hombres buenos y sabios.

Candi II
contacto


buscador

clima mas
Mín 10º - Máx 28º
despejado.gif

la frase del día
"Alerta que camina el changuicacerismo por América latina"
.
Cántico de los jóvenes radicales en la convención nacional de la UCR
Ver noticia


tapa edición impresa

la foto del día ampliar foto
ampliar foto

humor mas humor
ampliar


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados | Desarrollado por SPCOM