EEUU rechazó liberar a prisioneras y crece el temor por el rehén británico

Bagdad.- La vida de un británico secuestrado en Irak pendía hoy de un hilo luego de que Estados Unidos desautorizara una decisión del gobierno iraquí de liberar a una mujer presa en una cárcel del país, como exigen los captores, que ya asesinaron a dos rehenes norteamericanos.

"Las dos mujeres están bajo custodia legal y física de las fuerzas multinacionales en Irak y ninguna será liberada inminentemente", dijo un vocero de la embajada norteamericana en Bagdad.

Esta posición contradijo al vocero del Ministerio de Justicia iraquí, quien había dicho más temprano que el caso de una de las mujeres detenidas había sido revisado y que sería liberada hoy.

La medida podría haber allando el camino para la liberación del rehén británico Kenneth Bigley, secuestrado por militantes islámicos que amenzan con matarlo hoy si las autordades no liberan a "todas las musulmanas" prisioneras en Irak.

Los captores de Bigley ya decapitaron a los rehenes estadounidenses Jack Hensley y Eugene Arsmtrong y amenazaron ayer con hacer lo mismo con el británico en 24 horas.

Las autoridades iraquíes descubrieron un cuerpo decapitado y lo entregaron a la embajada de Estados Unidos en Bagdad, que confirmó que se trataba de Hensley, según dijo hoy un vocero de la familia del rehén en Estados Unidos.

La Casa Blanca ofreció sus condelencias a la familia Hensley. "Su fortaleza en un momento tan difícil es sorprendente. Los terroristas quieren doblegar nuestra voluntad, pero no lo harán", dijo el vocero de la Casa Blanca, Scott McClellan.

Estados Unidos asegura que sólo mantiene detenidas a dos mujeres en Irak, las bióloga Rihab Taha y Huda Ammash, bautizadas "Doctora Gérmen" y "Señora Antrax" por las tropas norteamericanas.

Un vocero del Ministerio de Justicia iraquí había afirmado que que el caso de Taha había sido revisado y que sería liberada probablemente hoy, aunque aseguró que la decisión no se relacionaba con la exigencia de los secuestradores. (Télam)