Bielsa se fue de la seleccción

La noticia conmocionó a todo el ambiente futbolístico. Marcelo Bielsa dejó de ser el técnico de la selección nacional. El hecho se conoció a primeras horas de la tarde y hubo que esperar hasta las 20, cuando el propio entrenador respondió a todas las preguntas de la multitud de periodistas que se dio cita en el predio de AFA en Ezeiza para escuchar sus razones. Y después de más de una hora de exposición, recibió a modo de despedida un aplauso espontáneo como reconocimiento quizás a su forma de manejarse en un lugar tan difícil.

Precisamente, Bielsa calificó a ese puesto que ocupó por espacio de seis años y hasta ayer como "el sitio más hermoso en el que puede estar un director técnico argentino", pero lamentó que se quedó "sin energías como para seguir llevando adelante el proyecto" que ahora le será ofrecido a Carlos Bianchi.

"No hubiera tomado esta decisión en el fracaso porque habría sido imperdonable para mi forma de sentir la vida. Pero esto no tiene que ver con que lo haga en un momento de éxito. Y lo hice sin ninguna porción de duda, porque de lo contrario estas resoluciones no se pueden adoptar. Actué de manera decente", remarcó el Loco que siempre sorprende.

El entrenador rosarino sostuvo que no existieron "otros factores" que impulsaran su decisión, descartó enfrentamientos con el presidente de AFA, Julio Grondona, a quien por el contrario le agradeció "el valorable gesto" de renovarle el contrato en 2002 y admitió que sus dirigidos puedan reprocharle bajarse "del barco" después de haber luchado tanto.

"Pero por el mismo razonamiento tengo que decir lo mal que me sentiría si ellos me dijeran el día de mañana que ya no soy el mismo y que por esa falta de energías no estoy logrando de ellos lo que antes sí hacía", aclaró.

"Y tampoco sentí que me faltó apoyo, no tuve muchísimo respaldo pero sí el suficiente, porque estuve en un sitio hermoso, en uno de los equipos más importantes del mundo por la estructura que se le ofrece a quien desarrolla una tarea profesional no difícil como esta. Pero con esa sensación de desgano encima, que sentí después del último partido con Perú, no me pareció serio continuar", confesó.

Durante la hora y diez minutos que se extendió la conferencia de prensa en el predio de AFA, en Ezeiza, el ya ex seleccionador nacional se reiteró en algunas respuestas ante las repetidas consultas de los periodistas presentes.

"Estoy seguro que no me voy a arrepentir de esta decisión. Mañana seré independiente y no sé lo que voy a hacer en el futuro. Pero que nadie piense que esto fue algo unipersonal. Lo consulté con las cinco personas que respeto en mi vida privada, con los distintos capitanes que tuvo el seleccionado y obviamente con mi grupo de trabajo", explicó.

Bielsa precisó que lo "más complicado" de su tarea era "compatibilizar el estilo de juego del equipo con la felicidad que le producía eso a la gente" y que pese a las críticas recibidas nunca consideró que tenía "enemigos dentro del periodismo".

"El momento para tomar este camino me parece el apropiado, porque ya se produjo la interrelación entre los jugadores más experimentados y los jóvenes. No creo que ofrezca un perjuicio hacerlo cuando estamos en la mitad de las eliminatorias, que aunque no están resueltas, sí están encaminadas", apuntó.

Destacó que le "provocó una gran felicidad haber dirigido durante seis años al seleccionado argentino y compartir la tarea con un grupo de excelentes colaboradores y nobles futbolistas".

Y así, sin claudicaciones que hirieran su ética ni falsas posturas que disimularan un sentimiento tan firme como el de renunciar al seleccionado argentino, Bielsa se fue sin que lo echen, por primera vez en el ciclo Grondona. Aunque esto, en su caso, no significa que volverá sin que lo llamen.

Bielsa podía empezar a cosechar los frutos de la reconcilación con el público.