Se conoció el listado, que incluye en su mayoría a empleados y arrendatarios

Los 18 imputados por los incendios en las islas frente a Rosario perdieron el anonimato

El expediente tiene 400 fojas y hay más de 30 testigos. Se tomarán las indagatorias el próximo 6 de septiembre

Los 18 imputados en la causa penal por los incendios en las islas frente a Rosario ya tienen nombre y apellido. La Capital tuvo acceso al listado con la identidad y procedencia de los acusados por incendio doloso (intencional) y/o culposo (por negligencia) que consta en el expediente Nº6.290. Un juicio que ya acumula 400 fojas en el Juzgado de Instrucción de Victoria (Entre Ríos), a cargo de Jorge Brasesco. El magistrado, que aseguró que hay más de 30 testigos en el caso, les tomará declaración indagatoria a los acusados el próximo 6 de septiembre y no descartó que aparezcan más implicados.

Los imputados son: José Bibiano Martínez (lote 25 A); Carlos Arturo Molina (arroyo del Mosquito); Alberto Balbuena, Manuel Basilio Mugurusa y Ariel Fabián Pereyra (todos de Rosario); Jorge Alberto Carrizo y Patricio Martín Brasesco (Victoria), Omar Otero (Arroyo del Salto), Ramón Sánchez y Juan Bartolo Díaz (1ª sección de islas); José Luis Balbi y Eugenio Balbi (2ª sección de islas); Solano Máximo Pereyra (arroyo Los Porteños); Pedro Toribio Báez (zona de islas); Ruperto Prada, Juan Pedro Prada, Eugenio Prada y Baudillo Prada (isla Paranacito).

Según trascendió, los imputados serían en su mayoría empleados (en algunos casos familias enteras) y arrendatarios. No obstante, habría también entre los nombres unos pocos dueños de tierras, tanto de Victoria como de Rosario.

El juez Brasesco remarcó que, según consta en los artículos 186 y 189 del Código Penal, por un incendio doloso corresponde una condena que va de 3 a 10 años de cárcel. En cambio, por un incendio culposo, la pena va de un mes a un año. No obstante, el magistrado señaló que ambos casos son excarcelables.

También indicó que otros tantos incendios ocasionados cerca del puente Rosario-Victoria provocaron la apertura de una nueva causa. Como la traza es un bien nacional, la lleva adelante el juez federal Aníbal Ríos, de Paraná.

Según aclaran los lugareños, incendiar los pastizales es una acción común durante agosto en las islas. Así se desratiza, se elimina el pasto seco de los predios para dar lugar a partir de la primavera a los brotes nuevos de los pastizales con los que se alimenta la hacienda. Pero esta actividad perdió su sesgo de "normalidad" cuando en marzo de este año se produjo un incendio de 20 mil hectáreas, que llenó a Rosario y varias localidades vecinas de cenizas y humo, y provocó irritación de garganta y ojos en muchos vecinos.

Lo peor es que ese siniestro, que se controló con la intervención del Plan Nacional de Fuego, fue el puntapié inicial de una cadena de focos ígneos que no cesó en todos estos meses.

Es más, los últimos se registraron en la noche del miércoles pasado por las imágenes satelitales del Centro de Sensores Remotos de Estación Terrena de la Universidad Nacional de Rosario. Varias columnas de humo alcanzaron los 3 mil metros de altura frente a las localidades de Villa Gobernador Gálvez, Ramallo, Baradero y Zárate.

El secretario de Medio Ambiente de la provincia, Marcelo Terenzio, atribuyó la quema indiscriminada al hecho de que creció la cantidad de cabezas de ganado en las islas. "Antes había 60 mil, pero ahora, como de este lado del río todas las tierras son sembradas por soja, la hacienda se traslada. En las islas la cifra ya supera las 100 mil cabezas", indicó.

Los incendios son un problema ambiental para Rosario.