Experiencia del Colegio Virgen del Rosario

La palabra pasó al frente

Tienen 12 años, están en 7º de la EGB y reflexionaron sobre lo que, describen, "ayuda a crear belleza"

La iniciativa fue de la docente de lengua; la excusa fue el Congreso Internacional de la Lengua que se prepara en Rosario para noviembre; las producciones fueron de los chicos del 7º año de la EGB del Colegio Virgen del Rosario, y la protagonista resultó ser la palabra, que, como expresaron los alumnos, "tiene derecho a salir de la boca".

No pasan los doce años; sin embargo, cuando su maestra, Liliana Spoto, los invitó a reflexionar sobre el III Congreso Internacional de la Lengua Española, llegaron a la conclusión que lo más importante del evento es la palabra. Así partió la iniciativa de pensar sobre el lugar que ocupa y los usos cotidianos que tiene. Las reflexiones se mostraron en cuentos, ensayos, poemas e incluso -entre otras formas expresivas- en una reescritura de los derechos que la palabra tiene para todos.

Los argumentos volcados en los trabajos pasan por afirmar que "hablar de estos temas es una manera de sentirse parte del congreso de la lengua", pero sobre todo es preciso destacar "la importancia de la palabra para la humanidad". Por si fuera preciso, recordaron entonces hechos de violencia -como los atentados del 11 de septiembre y el 11 de marzo- para decir que la "la palabra es el único medio mediante el cual el hombre puede regresar a la paz".

Pero como no quisieron dejar el trabajo entre las paredes del aula, se volcaron a escribir cartas al diario con una sola consigna: "Es tan importante este valor que descubrimos de la palabra que queremos que la gente se entere por el diario", señalan en una de las notas que enviaron a La Capital.

Las producciones son muchas. Entre ellas está la de Candela López, que dejó correr en un largo escrito lo que ella piensa sobre el tema: "Nos ayuda a crear la belleza de los poemas o la creatividad de un cuento. Nos representa en nuestros idiomas, nuestros modismos y en los nombres de nuestras patrias. Pero ¡atención a las palabras! -advierte Candela- para que sirvan debemos saber usarlas: las mentiras son palabras oscuras que nos esclavizan. Debemos aprender la palabra libre, la verdad".


Dimensión ética
No faltan en los textos de los chicos la dimensión ética del uso de la palabra. Por eso Gimena Peral -también de 7º año- afirma que "desde hace mucho las personas utilizan las palabras para prometer cosas que después no cumplen: eso, ¿no es una falta de respeto a la palabra?".

Ana Clara Galabrés, otra de las alumnas del grupo, escribió con soltura que "la palabra tiene derecho a salir de la boca", y además: "Debe ser protegida contra toda forma de abandono". Y, quizás, para hacerse eco de estas afirmaciones, Nicolás Degano, Joaquín Scrimaglio y Nicolás Micatrotta escribieron sobre por qué "la palabra debe ser expandida por el mundo: para los chicos y por la educación; para que los padres y maestros la transmitan a sus hijos para que luego sea transmitida por siempre".

El grupo rescató la idea de que es preciso "apreciar la palabra como nuestra vida, porque ella nos da alas para llegar al otro".

También y entre las razones que concluye Michele Contristano -alumna del 7º año- hay que "defenderla de las ausencias, de su uso pasajero y definitivo, y de los maltratos".

La maestra que coordinó la actividad, Liliana Spoto, está convencida de que el valor del trabajo está en la profundidad con que los chicos tomaron el tema, algo que les permite valorar los aspectos normativos propios de su área de trabajo, pero también ir más allá con sus reflexiones: "Es que al haber palabras hay ausencia de violencia", sostiene para reafirmar el rumbo elegido por sus propios alumnos.

"La palabra tiene derecho a salir de la boca y ser protegida contra toda forma de abandono", dicen los alumnos de 7º año.