Una falla eléctrica hizo estallar el cohete brasileño

Un informe presentado ayer en Brasil por José Viegas, ministro de Defensa, indica que factores técnicos e insuficiencia de recursos financieros contribuyeron a ocasionar el accidente ocurrido el 22 de agosto de 2003 en la base espacial brasileña de Alcántara que dejó 21 muertos. El documento señala que "el accidente se inició por el funcionamiento intempestivo del propulsor A de la primera práctica, causado por el accionar descontrolado -durante 40 segundos- de un detonador del conjunto de ignición de ese propulsor".

Pero la investigación también concluyó que contribuyeron a ocasionar el accidente factores operacionales como "la fragilidad en la infraestructura de apoyo del Centro de Alcántara a las campañas de lanzamiento", y también "la insuficiencia de recursos financieros".

En cuanto a las "posibles" causas que provocaron el accionar del propulsor, la investigación indica que pudo deberse a una descarga de corriente eléctrica por la línea de fuego, o una descarga electroestática en el interior del detonador.

"No es posible determinar con total precisión cuál de las dos hipótesis responde a la causa del accionamiento del detonador", puntualizó el informe.

El ministro Viegas fue claro en afirmar que "no se comprobaron fallas humanas deliberadas", aunque reconoció "dificultades en el campo humano" que llevó a cabo el proyecto del fracasado lanzamiento del cohete.

El accidente, en el que murieron 21 técnicos brasileños cuando trabajaban en la plataforma de lanzamiento de la base aeroespacial de Alcántara (estado de Maranhao, nordeste del país), ocurrió cuando sorpresivamente estalló el cohete, denominado Vehículo Lanzador de Satélites (VLS), provocando un voraz incendio en la plataforma. (AFP)