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 jueves, 05 de julio de 2007  
Paseó de madrugada en un banco, quiso robar, sonó la alarma y huyó
Un joven entró al Municipal de Arroyito, abrió un cajón con monedas y escapó ante las sirenas. La entidad asegura que rompió la puerta para acceder. La policía, que la halló abierta

Que alguien intente robar un banco de madrugada no es tan inusual. Sí que lo haga, como revelaron en principio fuentes policiales, tentado al hallar la puerta principal abierta. Para las autoridades de la entidad, sin embargo, no fue eso lo ocurrido. Ellas afirman que, en efecto, un muchacho deambuló un minuto por el interior de la sucursal Arroyito del Banco Municipal poco antes de las 4.30 de ayer. Pero que lo hizo tras lanzarse como una locomotora contra el blindex y vencer la cerradura. Y no porque alguien se hubiera olvidado de cerrar.

   Igualmente que un individuo se zambulla contra la puerta de un banco y la rompa no deja de ser noticia. Eso muestra en detalle la imagen de la cámara de seguridad interna de la sucursal que está en Alberdi 700 bis donde, además, se observa con buena definición el rostro del intrépido. Así lo señaló a La Capital el tesorero general y gerente de seguridad del Municipal, Alejandro Gitlin.

   “Nos asombra que haya corrido la versión de la puerta abierta. Hay una nítida grabación de una persona rompiendola con violencia que aún no fue entregada al juez. Recién mañana (por hoy) el banco hará la denuncia de lo ocurrido en la comisaría 9ª”, dijo el funcionario.

   No obstante fuentes policiales abonaron con detalles esa versión. Señalaron que luciendo un gorrito de lana de Rosario Central y en la soledad de la madrugada, el visitante se desplazó en el interior de la filial unos diez metros. Fue a la caja número 1 y cuando abrió un cajón lleno de monedas, el sonido de la alarma lo aturdió y salió huyendo del lugar.



Dos mundos. ¿Alguien puede olvidarse de cerrar la puerta de un banco? Tal fue la incógnita surgida al correr la novedad de los hechos. “Investigamos cómo la puerta quedó sin cerrar. Queda claro que la cerradura de la puerta está en perfecto estado. No fue forzada. El hombre que ingresó al banco no se llevó una sóla moneda y cuando sonó la alarma se fue”, explicó a este diario uno de los pesquisas.

   La descripción de Gitlin parece aludir a otro hecho. “Disponemos de la filmación de un adulto joven que pasó a las 4.20 por delante del banco. Se advierte que primero hace fuerza en la única puerta de entrada. Luego retrocede, toma impulso y golpea con el pie parte de la cerradura central de la puerta blindex. Con esa acción la cerradura se tuerce. Luego se acerca, apoya los puños en el vidrio, cuidando no dejar impresiones digitales, tira hacia atrás una alfombra de goma y entreabre la puerta”, detalló.



 Abrete sésamo. A las 4.20 la alarma del banco se activó. Cuando los efectivos de la seccional 9ª llegaron al lugar encontraron la puerta abierta, según dijeron las tres cerraduras intactas, el cajón de la caja 1 tirado en el piso y algo de desorden. Desactivada la alarma, los pesquisas apreciaron al encender las luces una decena de cámaras ubicadas en el local.

    Según fuentes policiales, la película del robo frustrado mostraba a un hombre joven, con su cabeza cubierta con una gorrita de Central. El sujeto llegó caminando, se paró ante la abertura, observó, le pegó un empujoncito y la puerta se abrió. El ladrón se metió, caminó con paso decidido unos diez metros delante de la línea de cajas y fue a la 1, la más alejada de la puerta y el único lugar por el que se pasa del otro lado del mostrador. “Tomó un cajoncito donde había unos 30 pesos en monedas de diez centavos y sonó la alarma”, comentó el vocero.

   El final de la película, al revés del inicio, es previsible. El hampón con el gorro canalla salió disparado y se perdió en el fuera de foco. “Toda la secuencia de esta persona en la sucursal —afirma Gitlin— duró un minuto diez. Cuando suena la alarma tira un cajón al suelo, caen monedas de 5 y 10 centavos al piso y escapa. Luego llega personal nuestro, en 20 minutos, con personal policial. Hubo irrupción violenta”. En que no existió robo, al menos, hay acuerdo. l
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El Banco Municipal de Alberdi 718 bis. Hoy el juez recibirá el video sobre el enigmático suceso.

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