La Justicia no define competencias y el piquete sigue generando caos

El pedido de despejar la avenida de Circunvalación volvió al fuero provincial. Inminente resolución

Javier Felcaro / La Capital

El juez federal Roberto Angellini se declaró ayer incompetente para despejar el piquete instalado hace casi una semana en la avenida de Circunvalación y Baigorria por habitantes de barrios del noroeste de Rosario afectados por la última inundación y devolvió el expediente al fuero provincial para que retome las actuaciones. Frente a la decisión del magistrado y la creciente bronca de vecinos y camioneros, desde la Intendencia reclamaron “un cambio de actitud” por considerar que “no es una cuestión de jurisdicción”.

A su vez, el gobernador Jorge Obeid desechó la represión, pero aclaró que, cuando sea el momento y en el marco de la ley, habrá que liberar la transitada arteria.

El subsecretario Legal y Técnico municipal, Dalmacio Chávarri, explicó a La Capital que Angellini declaró su incompetencia por considerar que, “independientemente de que la conducta ilícita se desarrolla en un área de jurisdicción federal, no están en riesgo los intereses de la Nación”.



Malestar. Angellini remitió las actuaciones a la jueza Correccional Nº1, Georgina Depetris, para que continúe con las actuaciones. Pasado el mediodía, Chávarri insistió en tribunales con la necesidad de liberar de manera urgente la estratégica avenida. Por su parte, la magistrada se comprometió a estudiar el caso y a tomar una decisión a primera hora hoy.

   “Estamos preocupados por una discusión técnica sobre problemas de competencia que deja de lado un delito que sigue desarrollándose”, sentenció Chávarri. Los abogados de la Intendencia habían mantenido el martes pasado sendos encuentros con el juez y la fiscal en turno, Adriana Saccone, para acelerar el pedido de desalojo.

   Incluso los letrados del Palacio de los Leones interpusieron otra denuncia contra el corte. A su vez, la Fiscalía le solicitó a la policía provincial la ampliación del breve parte preventivo remitido al fuero federal y exigió mayores detalles en la instrucción del sumario. Sin embargo, Angellini terminó apartándose.

   Paralelamente, el subsecretario de Gobierno municipal, Fernando Asegurado, reclamó “un cambio de actitud” por estimar que “no se trata de una cuestión de jurisdicción”. Y destacó que “hay una conducta ilícita” y que el piquete “se está convirtiendo en una falta”.

   “No pedimos represión sino un cambio de actitud, una negociación o intermediación. Pero el canal de diálogo se cerró y, a través de la Justicia, buscamos una tregua”, explicó el funcionario. Luego sostuvo que, tras la catástrofe pluvial de marzo y abril, la Municipalidad mantuvo “cientos de reuniones con los vecinos y no paró de trabajar”. Y concluyó: “Reclaman un resarcimiento económico, pero son de lugares en los que tenemos dudas de que haya entrado el agua”.

   Previamente, el intendente Miguel Lifschitz había vuelto a arremeter contra la protesta. “Es un capricho, una extorsión de algunos sectores”, aseveró, para también evaluar que los perjuicios para el resto de los rosarinos son “muy grandes porque los vecinos están incomunicados y los camioneros ven afectado su trabajo”.

Sorrento y Circunvalación, ayer por la mañana. El piquete de vecinos de Nuevo Alberdi generó un gran embotellamiento en las arterias colectoras de la Circunvalación. Los vecinos, en llamas.