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 miércoles, 23 de marzo de 2005  
Le balean los genitales en el baño de su comercio
Ocurrió en una parrilla de Alvear. Para la policía no hay indicios de intento de robo sino un "hecho oscuro"

Un hombre de 50 años fue herido por un arma de fuego en un testículo en un hecho un tanto confuso ocurrido en una parrilla ubicada sobre la ruta 178, en jurisdicción de Alvear. La víctima del tiro fue operada exitosamente en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca), adonde había llegado por sus propios medios tras manejar herido más de 15 kilómetros y ayer se recuperaba satisfactoriamente.

El titular de la subcomisaría 8ª de Alvear, Daniel Cáceres, no confirmó la primera versión que hablaba de "un intento de robo". El oficial señaló que todo empezó el lunes, alrededor de las 21.30, mientras Angel Núñez, de 50 años, se encontraba cenando con su mujer y su hijo de 5 años en la parrilla de la cual es uno de los dueños. El local se llama "Kilómetro 11" y está ubicado precisamente a esa altura de la ruta provincial 18 (la prolongación de avenida Ovidio Lagos).

Aparentemente, Núñez y su familia estaban cenando en la parrilla, que sólo abre al público los fines de semana, cuando el hombre se levantó para ir al baño, ubicado fuera del local comercial y con un doble ingreso (uno por el salón y otro por el patio). En esas circunstancias se escuchó una detonación que sobresaltó a la mujer y a su hijo. Enseguida, Núñez reingresó al comedor herido y le pidió a su esposa que lo llevara hasta un hospital porque le habían disparado.


Un intruso en el lugar
Según la declaración preliminar que, tras ser operado, realizó el hombre a la policía, cuando fue al baño se encontró con un intruso que lo empujó. El respondió con otro empujón y entonces la otra persona, a quien no pudo describir, le disparó y huyó. "Aparentemente ambos se asustaron y el tipo sacó un arma y le disparó. Pero en ningún momento Núñez alude a un intento de robo ni tampoco se denunció la sustracción de elemento alguno", afirmó Cáceres.

Otro testigo que declaró fue el sereno del lugar, quien a esa hora se encontraba descansando en una dependencia ubicada en la parte trasera del local. "El hombre -sostuvo Cáceres- escuchó el disparo pero no alcanzó ver a nadie. Lo único que comentó fue que la esposa de Núñez le dijo que tenía que llevar a Angel al hospital porque se había accidentado".

Según el diagnóstico con el que ingresó al Heca, Núñez presentaba una herida de arma de fuego en el testículo derecho sin orificio de salida. Pero como tampoco se le encontraron restos de plomo, se especulaba con que el proyectil sólo lo habría rozado, sin introducirse en su cuerpo. Hasta ayer el hecho estaba caratulado como lesiones graves, ya que no se había podido constatar si hubo un intento de robo o alguna sustracción.
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