Afganistán: voto masivo y denuncias de fraude

Las primeras elecciones del país fueron repudiadas por 14 de los 18 candidatos presidenciales

Kabul. - La primera elección presidencial de la historia de Afganistán se celebró ayer sin ser alterada por ataques terroristas, como se temía, pero generó una crisis política cuando 14 de los 18 candidatos denunciaron irregularidades y pidieron su anulación.

La votación fue masiva, según las Naciones Unidas y otros observadores, pero ya antes de que cerraran las urnas 14 candidatos rechazaron los resultados y pidieron nuevas elecciones, aseguró Ramatulá Jalil, vocero de los contestatarios.

"Es muy tarde para llamar a un boicot de la elección, cuando millones de afganos desafiaron la lluvia y la nieve para ir a votar", respondió el presidente Hamid Karzai, gran favorito para ganar los comicios. "Debemos respetar la voluntad del pueblo", dijo a la prensa, y agregó que la jornada cívica ha sido "un éxito". Los afganos no sólo desafiaron al crudo invierno de su país: también contestaron con su masiva presencia en las urnas a las reiteradas amenazas de asesinar a los que fueran a votar de los talibanes y sus aliados.

Los contestatarios, que pidieron infructuosamente a las autoridades la suspensión de la votación, dijeron haber encontrado numerosas irregularidades. "Hemos constatado intervenciones muy claras en este proceso electoral. Nuestros representantes en Kabul y en las provincias informaron de personas con varias tarjetas electorales y de gente que instaba y presionaba a los electores a votar por Karzai", detalló el candidato Abdul Satar Sirat.

Massuda Jalal, la única mujer candidata, también denunció irregularidades, pero optó por pedir que una comisión las investigue.

Manoel de Almeida e Silva, funcionario de la ONU, dijo que la asistencia a las urnas fue "masiva" y admitió que hubo "irregularidades", que serán examinadas por la comisión electoral.

Unos 10,5 millones de electores en Afganistán, así como más de un millón de refugiados afganos en Pakistán e Irán, fueron llamados a las urnas por primera vez en la historia de este país devastado por 25 años de guerras civiles e intervenciones extranjeras.

En Kabul las quejas no demoraron en surgir debido a que la tinta empleada para marcar el pulgar, y evitar así la repetición del voto, no era indeleble. Según las Naciones Unidas, los funcionarios electorales se confundieron y emplearon una tinta destinada a otros usos que se borra fácilmente.


Tinta no indeleble
Un observador que visitó las provincias rurales de Kapisa y Karwan, al norte de Kabul, dijo que el sistema de tinta era "un desastre" y denunció la falta de organización y planificación.

"Si los afganos tienen dos documentos electorales porque quieren votar dos veces, entonces son bienvenidos", había bromeado hace poco el presidente Hamid Karzai. No hay que preocuparse, aseguró. "Si alguien va a votar, su dedo quedará marcado con tinta, y la tinta permanecerá tres o cuatro días", prometió.

Ray Kennedy, vicepresidente de la comisión electoral, admitió la existencia de problemas logísticos que obligaron a prorrogar dos horas el funcionamiento de los centros de votación.

Tras la denuncia de los 14 candidatos, un observador extranjero, que pidió no ser identificado, se declaró "muy inquieto". "Evidentemente es una situación muy difícil", dijo, y expresó su temor de que la impugnación de la elección se convierta en un gran factor de inestabilidad política.

"Esto puede crear mucha confusión en los electores que ya están algo confusos porque no conocen el proceso electoral", dijo otro observador, en referencia a la nula tradición democrática del país.

De acuerdo con el proceso previsto por las Naciones Unidas, los resultados se harán públicos dentro de dos o tres semanas.

Aunque no se ha informado de la existencia de atentados, en Oruzgan (centro sur), fuerzas de la Isaf, la misión militar internacional, mataron a 25 presuntos talibanes que les tendieron una emboscada poco antes de comenzar la votación, según el gobernador de la región. Luego de la elección, un convoy que transportaba urnas fue atacado en Oruzgan, dijo Almeida e Silva, precisando que los votos no han sufrido daños.

Las mujeres votaron en gran número, pese a las amenazas de muerte de los talibanes.