|
sábado,
17 de
noviembre de
2007 |
La misión es gustar
El seleccionado argentino intentará conseguir esta tarde, cuando enfrente a Bolivia en el estadio Monumental, su tercera victoria consecutiva en el inicio de las eliminatorias para el Mundial de Sudáfrica 2010.
El encuentro, que será dirigido por el peruano Víctor Hugo Rivera, comenzará a las 16 y será televisado por Canal 3 y TyC Sports.
El estadio seguramente estará colmado, si se toma como parámetro la gran expectativa creada en la venta anticipada de localidades y la recaudación obtenida por la misma, aunque la gran cantidad de público que acudirá al Monumental verá cómo el deteriorado césped seguramente limitará el juego de varios habilidosos jugadores argentinos y también de los escasos donantes de talentos de la estructura de la selección del Altiplano.
Después de los éxitos conseguidos en las dos primeras fechas ante Chile y Venezuela, ambos por 2 a 0, el elenco de Alfio Basile buscará consolidar el liderazgo en soledad en las eliminatorias con una formación de neto corte ofensivo que comenzó a gestarse a mitad de semana cuando el entrenador anunció que colocaría en cancha a tres delanteros de oficio.
Si bien las lesiones impidieron que algunos jugadores como Juan Román Riquelme, Hernán Crespo o Gabriel Heinze, quien ya quedó fuera del duelo ante Bolivia, trabajaran con normalidad durante la semana, Argentina tiene variantes como para poner en cancha una formación que priorice el arco de enfrente. Sobre todo ante el equipo que es considerado, por lejos, el más accesible de la eliminatoria sudamericana
Así, una de las dudas que aparece en la formación del Coco es saber si Crespo estará o no desde el arranque y si será o no el punto de referencia en el área para Juan Román Riquelme, Lionel Messi y Carlos Tevez.
Si el delantero de Inter no llega, su lugar será ocupado por Sergio Agüero, conformando una delantera tan joven como temible, aunque con escaso potencial aéreo.
En tanto, la lesión de Heinze en su rodilla derecha no sólo provocó la convocatoria de Jonathan Bottinelli sino que abrió el interrogante acerca de quién ocupará el lateral izquierdo. ¿Los candidatos? Javier Zanetti, con Hugo Ibarra por la derecha, o Nicolás Burdisso, con el Pupi por el sector opuesto.
Por el lado de los bolivianos, su técnico, Erwin Platini Sánchez, no llega con grandes misterios: jugará con un esquema 4-4-2 y tomará sus recaudos pese a que sus jugadores hayan declarado que no entrarán al Monumental a defenderse cerca de su arquero.
Tras el choque ante los bolivianos, Argentina visitará el martes a Colombia en el histórico El Campín de Bogotá.
Esa será otra prueba de escaso riesgo para la selección nacional, aunque más complicada que la de esta tarde.
Quizás la altura sea el obstáculo más importante que deba sortear el conjunto de Basile en la capital colombina, pero antes deberá llegar el turno de Bolivia, selección a la que deberá someter con meridiana claridad y contundencia si quiere retirarse de la cancha de River con el aplauso de un público satisfecho. l
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
|