El músico brasileño Milton Nascimento toca el domingo próximo en el teatro Broadway

Milton Nascimento: “Adoro Rosario y se los quiero demostrar"

Prepara un disco con el hijo y el nieto de Tom Jobim y contó: “Nunca trabajé tanto”

Orlando Verna / Escenario

“Adoro Rosario y tengo la felicidad de estar con ustedes con esta banda, que es la mejor que tuve en mi vida, con un show completamente sin patrones, que todos los días puede cambiar, con el que estamos viajando por todo el mundo y nos está dejando muy felices. Y quiero demostrar eso para la gente de Rosario”. Así, como mirando a los ojos a los rosarinos que ya lo recibieron en agosto de 1992, el músico brasileño Milton Nascimento presentó el show que brindará el próximo domingo, desde las 21, en el teatro Broadway (San Lorenzo 1223). Desde Río de Janiero, en comunicación telefónica con Escenario, el autor de “María, María” dijo que, a los 65 años, “nunca trabajó tanto” y que su próximo disco será con los herederos de Tom Jobim, un material que aún no se grabó y que ya tiene shows pedidos en Europa y EEUU.

—El último disco que grabó fue “Pietá” de 2002, ¿qué pasó en estos años?

—Estuvimos haciendo una gira mundial con “Pietá” hasta este año. Hicimos también tres DVD. “Ser Minas tão Gerais” lo hice con un grupo de actores que trabajan con chicos de las zonas más pobres de Minas Gerais. En realidad íbamos a hacer cuatro show y el proyecto al final duró cuatro años.

—¿Y los otros dos?

—El otro DVD es “A sede do peixe” donde están la mayoría de los brasileños con los que trabajé y que a mí me gustan. Es un trabajo muy bien hecho. Y por último hice “Pietá”, que es el show del disco. Creo que nunca trabajé tanto. Llegué a estar haciendo cuatro shows diferentes al mismo tiempo, cada uno con su propio estilo. Algunas veces ni yo sabía exactamente cuál era el show que tenía que hacer (se ríe).

—¿La composición sigue siendo su mayor actividad?

—Sí, estoy trabajando mucho en la composición, que es lo que más me gusta. Lo que más hice fueron bandas de sonido, para cine, obras de teatro, para ballet o lo que sea. Además, de estar viajando para todos lados.

—Hasta aquí lo que hay, ¿qué se viene?

—Cuando Tom Jobim estaba vivo y yo iba a ver sus conciertos, siempre me llamaba para subir al escenario. Y les decía a sus hijos que mi voz era la que más tenía que ver con él. Tom ya había sugerido que hagamos un CD con temas de él y conmigo cantando. Infelizmente no tuvimos tiempo de hacer eso, pero lo vamos a hacer con el Jobim Trío, donde están el hijo de Tom, Paulo, en guitarra, y el nieto, un pianista que parece estar tocando Tom otra vez. Y nos van a acompañar un bajista y un baterista. Vamos a grabar canciones de Jobim, Dorival Caymmi y algunas mías. En este momento las estamos eligiendo. Luego vamos a salir de gira. Lo más interesante es que todavía no entramos a grabar y ya tenemos pedidos de shows de Europa, Estados Unidos y Japón, y con seguridad iremos por América latina y Argentina.

—¿Es real que su gusto por estar siempre rodeado de músicos y compartir proyectos, ensayos y recitales es una herencia de su familia?

—Todo eso proviene de mi padre y mi madre, porque la cosa más importante para mi es la amistad. Yo fui criado en un ambiente así (nació en Río de Janeiro, pero de chico se trasladó con sus padres adoptivos a Três Pontas, en el estado de Minas Gerais). Yo era pequeño y veía cómo mis padres hacían hasta lo que no podían para ayudar a sus amigos. Mi casa era la más llena de chicos. Mi madre adoraba recibir a mis amigos y le gustaba hacer chocolate, tortas y todo eso. Desde ese momento comprendí qué era la amistad, una cosa sin la cual no consigo vivir. Y como fui criado así, no consigo ser de otra manera. No me gusta estar solo, tengo muchos amigos, pero es una cosa muy natural y le debo eso a mi familia, a mi padre y a mi madre.

—Usted sabe que no puede pasar por Buenos Aires y ahora por Rosario sin cantar “María, María”...

—En todos lados es así. Y la otra es “Travessia”, que es la canción más linda de mi primer álbum (“Milton Nascimento”, al punto que, cuando se reeditó, llevó el nombre de la canción). Yo aparecí con esa canción en 1967 y desde ese momento, a cualquier lugar del mundo al que vaya, el público pide esos temas.

Integrante de la selección de artistas que ubicó a Brasil en lo más alto de la música universal, Nascimento canta como pocos.