Un monumento descuidado

Cada vez que paso frente al monumento a uno de los más grandes boxeadores que vi, Carlos Monzón, por la denominada ruta de la costa (la ruta provincial Nº 1) disminuyo la velocidad y lo saludo. En una reciente oportunidad, como viajaba con un familiar que vive en Suiza, me detuve para observarlo de cerca. Y qué mala sorpresa me llevé al ver el total estado de abandono en que se encuentra el mismo. A las placas que indican las 14 defensas que hizo se le han borrado las letras. En la parte de atrás el estado es lastimoso y se usa como baño. Pienso que alguien debe hacerse cargo. A los senadores que pasan por la ruta tal vez los vidrios polarizados no los dejan ver, por eso les hago este humilde aviso.

Ernesto Juan Leuenberger

DNI 6.039.344