Lo que la vida nos depara

Un mar de lágrimas y una gran desazón le causó a la comunidad de la capilla Niño Dios, de España 972, el traslado del padre Damián Nannini, luego de muchos años de labor ininterrumpida. Fue y es un hombre íntegro, honesto y muy inteligente, y un mejor sacerdote, samaritano y con una ardiente cordialidad hacia los fieles, que lo han acompañado todos estos años. Pero a no desfallecer, Dios siempre brinda una nueva oportunidad y conocer gente nueva y acercarnos al prójimo es una bella tarea. Hace unos meses, la comunidad de la capilla recibió a los sacerdotes Emilio Cardarelli y Pablo Lasarte, quienes rápidamente entraron en el corazón de la gente, gracias a su don de hombres comprometidos, curas con vocación de servicio, a sus carismas y a sus homilías, las que ilustran a la feligresía. Con esto quiero decir que la vida siempre es un desafío incomparable. Los malos momentos hay que saber soportarlos con paciencia y temple para así gozar más de los buenos instantes que la vida nos depara. Gracias a los tres.

Jorge Pereyra Sahd

DNI 13.794.059