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 domingo, 22 de julio de 2007  
"En todos los escrutinios provisiorios siempre existieron diferencias"

Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

Un pedido al Tribunal Electoral por parte de un apoderado del Frente Progresista de una reunión con autoridades del Ministerio de Gobierno que integran la comisión del escrutinio provisorio y los partidos que tienen representación en ella para precisar recaudos de cara a la elección general del 2 de septiembre parece ser la consecuencia inmediata de la preocupación que hiciera pública el candidato a gobernador de esa coalición, Hermes Binner. El socialista afirmó que la diferencia entre los resultados dados a conocer la noche del comicio y los arrojados días atrás por el escrutinio definitivo es “algo más de dos votos mal sumados”.

   El jueves último, Avelino Lago, secretario electoral de la provincia, difundió las cifras definitivas según las cuáles individualmente el candidato más votado fue Hermes Binner, con 632.338 votos, seguido por los justicialistas Rafael Bielsa, con 425.195 votos, y Agustín Rossi, con 228.501 votos.

    Al confrontarse por agrupaciones, es el Frente para la Victoria (por la sumatoria de lo obtenido entre los oficialistas Bielsa y Rossi) el que al obtener 653.696 votos, aventaja al Frente Progresista por 21.358.

   Ahora bien, el escrutinio provisorio había consignado para Binner (único candidato del Frente Progresista) 617.860 sufragios que al confrontarlos con los 632.338 realmente obtenidos tal como evidenció el escrutinio definitivo importa una diferencia de 14.478 votos. Esto llevó a la reacción de la dirigencia socialista que habló de “manipulación”. Es decir, de una supuesta picardía oficialista por la que se instaló una sensación diferente a la real.

   Sin embargo, en la Secretaría Electoral muestran las cifras de un modo diferente. “El único escrutinio de validez legal y que causa efecto es el definitivo. El provisorio es un adelantamiento de datos a la opinión pública. Es un mecanismo, comedido si se quiere, destinado a mitigar la comprensible expectativa por el resultado. Esto que digo no es ninguna novedad para nadie. Lo saben los partidos, los candidatos, los apoderados y los votantes”, explicó Lago ante una consulta de este diario.

   El funcionario precisó que “en los resultados definitivos los votos obtenidos por todos los partidos que presentaron candidatos en las primarias sumaron un poco más. El Frente Progresista creció 14.478 pero también el Frente para la Victoria tiene 11.807 votos más en relación al resultado consignado en el escrutinio provisorio, que había sido de 641.889. Es decir, que el resultado no ha variado o, en todo caso, la variación está dada por 2.671 votos que surgen de comparar estas dos últimas cifras. Ese podría ser, si se quiere, el crecimiento real del Frente Progresista”.

   Para Lago, los porcentajes definitivos son igualmente elocuentes: “El Frente para la Victoria obtuvo el 46,47% de los sufragios y el Frente Progresista el 44,96%. Acá la variación del escrutinio provisorio al definitivo para el primero es de 0,004% y del 0,019% para el segundo”.

   —¿El escrutinio provisorio es una “gauchada” o un “favor” que ustedes le hacen al votante para que no se vaya a dormir en ascuas?

   — Dicho así sería poco serio y no lo es. El escrutinio provisorio en la provincia de Santa Fe está regido por la ley 11.659 vigente desde 1999. La ley crea una comisión responsable de procesar los datos que surgen de los escrutinios provisionales de mesa. De esta comisión no sólo participan órganos del gobierno sino que la ley otorga el derecho de fiscalización a los partidos políticos que hayan oficializado candidatos. Ahora bien, si cuando dice “ustedes” se refiere al Tribunal Electoral, tengo que decirle que le cabe el control precomicial, comicial y poscomicial de modo exclusivo y excluyente, la realización del escrutinio definitivo y la proclamación de quienes resulten electos. En cuanto al provisorio lo que nos compete es fiscalizar que se haga y secuestrar la documentación una vez hecho para el escrutinio definitivo.

   —Entre el escrutinio definitivo y el provisorio no debería haber diferencias, ¿ese sería el estado ideal de las cosas?

   —Así es. Cuando hablamos de resultado nos referimos al concepto de ganador y perdedor. Desde que la comisión funciona, habiendo tenido distinta composición, no hubo diferencias. Los ganadores y perdedores del escrutinio provisorio ratificaron tal condición en el definitivo. En cuanto a cifras y porcentajes de votos casi siempre podrán existir diferencias, regularmente mínimas por cierto. Básicamente porque la autoridad de mesa y los fiscales en el escrutinio de mesa, escrutan y califican los votos pero quedan fuera de su competencia ese día los recurridos, impugnados y de las fuerzas de seguridad. l


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