Lavagna lanzó en Jujuy su candidatura

El candidato a presidente de la coalición UNA, Roberto Lavagna, lanzó la campaña electoral con un medido discurso en el que reafirmó su enfrentamiento con el gobierno nacional, llamó a encauzar el modelo económico y pidió “no desaprovechar una oportunidad de construir para los próximos 10 años”.

   El acto realizado a más de 2.500 metros de altura en la ciudad de Tilcara (considerada la capital arqueológica de la región del noroeste) significó el primer evento oficial de la fórmula que integra Lavagna junto al senador jujeño Gerardo Morales, quien aseguró que en octubre se discutirán “dos alternativas” de gobierno.

   “En octubre se van a discutir dos proyectos: el nuestro no tiene que ver con la construcción de poder pisando cabezas”, enfatizó el titular del comité nacional, ante unos 2.000 lugareños que siguieron el simbólico acto, en el que los candidatos realizaron el ritual norteño de la Pachamama y recibieron una bandera realizada en materiales naturales. Lavagna brindo un mensaje estructurado, más orientado a la gestión y la institucionalidad que el de su compañero de fórmula, quien optó por un discurso más enérgico y confrontativo, a tono con su rol de presidente de uno de los principales partidos de la oposición.

   Según explicó el ex ministro de Economía, la elección del escenario del lanzamiento tuvo que ver con la intención de integrar a todos los sitios del país y a integrar “la política con la cultura”, en marcada contraposición con el formal lanzamiento de la candidatura presidencial de la senadora Cristina Fernández, en el teatro Argentino de La Plata el último jueves.

   En su mensaje, Lavagna buscó capitalizar los logros de su gestión en el Palacio de Hacienda para la actual campaña e hizo un rápido recorrido de las principales medidas que permitieron que la Argentina retome su rumbo. “Tenemos una enorme potencialidad: hace cinco años vivíamos en un caos, con desempleo y riesgo de disolución nacional y salimos adelante. Terminamos con locuras como el corralito, el corralón, las monedas basura y pusimos en marcha el capital”, enumeró en su discurso, que se extendió por 20 minutos.

   En contraposición, endilgó al gobierno haberse “metido en aventuras empresarias raras, se ha desviado del curso de la economía, apareció la inflación, una máquina de generar pobres y destruir la clase media” y dijo sentirse capaz de “devolverle a la República sus equilibrios”. Lavagna se mostró optimista. l