Restringieron el GNC, hubo largas colas y menos taxis

Sólo autorizaron a expender el combustible a una sola manguera por estación

"Esto es lo único que faltaba, tengo una bronca terrible". Jorge lo dijo todo; tiene un taxi y los sábados suele hacer una buena diferencia. Sin embargo, ayer pasó su peor día de la semana. "Y si no puedo laburar, ¿qué hago?". La pregunta tiene un fundamento irrefutable.

La crisis energética volvió a hacerse sentir; hubo restricciones en el suministro de gas natural comprimido (GNC) y largas y sinuosas filas que alcanzaron a tener cuatro cuadras en las estaciones de servicio rosarinas.

Sólo se autorizó habilitar una manguera por playa y los usuarios no dejaron de quejarse. Esta determinación proseguirá hasta nuevo aviso por lo que se teme que escaseen los taxis.

"Llegué a las 14.30 a cargar a Baigorria y Avalos; había dos cuadras de autos esperando y me fui porque estaba apurado. Después encontré menos gente en Rondeau y Gurruchaga, pero igual tardé unos 45 minutos". Marcelo fue uno de los afectados y se mostró disgustado al responder a las preguntas de La Capital. Fue tarde a trabajar y su jefe no es demasiado comprensivo.

Desesperados por cargar sus tubos amarillos, muchos taxistas rosarinos decidieron protestar espontáneamente en las estaciones donde estaban. "A nosotros nadie nos subsidia el combustible, y encima que pagamos el gas hasta el último peso, nos lo cortan", se quejó uno de ellos.

El nivel de bronca se evidenció en sus frases que también mostraron mucha preocupación en virtud de que los cortes se vuelvan una constante.

La psicosis colectiva se apoderó de los rosarinos. Apenas se echó a rodar en los medios la racionalización en el expendio del combustible, las hileras apiñadas de coches se reproducían en cada punto de la ciudad.

La recorrida de este diario por Alvear y Brown, Travesía y avenida de las 3 Vías, Francia y Montevideo, Santa Fe y España, Sarmiento y Pellegrini y Lagos al 5200, confirmó la misma postal. "Encima que cuesta encontrar el mango, te largan una medida así, de la noche a la mañana", se quejó Alberto, un tachero condenado a esperar en Alvear y Brown.

La primera decisión de este tipo fue tomada el viernes bajo la supervisión de la Secretaría de Energía cuando las distribuidoras de Buenos Aires interrumpieron el suministro. Sin embargo, ayer fue el turno de Rosario. A partir de las 6, la misma medida fue implementada por Litoral Gas, que tuvo interrumpir el suministro "hasta nuevo aviso".


Confusión
Rubén Fernández es miembro de la Federación de Expendedores de Nafta del Interior Faeni y aseguró que la notificación oficial fue cuanto menos confusa De este modo detalló Primero decía que se podía vender cero metro cúbico de gas es decir nada Pero después indicaba que las estaciones podían trabajar con una manguera dando prioridad a las ambulancias los patrulleros y los bomberos

La medida, según se indicó en el mismo comunicado, fue tomada por un comité de crisis integrado por las distribuidoras de gas de todo el país, el Enargas (Ente Nacional Regulador del Gas) y las Secretaría de Energía de la Nación.

Los expendedores también presentaron sus quejas. "El sector tiene una gran crisis de rentabilidad. Es verdad que hay que poner el hombro, pero los nuestros ya no dan más", dijo Fernández.

Largas colas hubo ayer para cargar gas.