Flojo botín de asaltantes enmascarados de un galpón

Tres hombres encapuchados, uno de ellos con una careta de monstruo, asaltaron ayer a la madrugada una empresa de transporte de barrio Ludueña y se llevaron las pertenencias de uno de los dueños y de un chofer. Fue un golpe que duró no más de diez minutos, pero que a juzgar por el botín que se llevaron los enmascarados, no fue muy redituable.

Lorenzo Ricchiardi, de 82 años, es uno de los dueños de la empresa que lleva su apellido y que está ubicada en Junín 5733. Ayer, a las 4.40, el hombre ya estaba despierto y se preparaba para tomar el desayuno cuando aparecieron los hampones.

El lugar es un galpón en cuyo frente hay un portón azul con una abertura en su parte superior. A un costado se encuentran las oficinas que cuentan con unas rejas del mismo color en la fachada. En ese inmueble vive, además de Ricchiardi, un camionero con su hijo menor de edad, quienes ocupan una pieza situada en la parte trasera.

El trío se introdujo al predio trepando por el portón. "Me sorprendieron cuando estaba por desayunar. Dos estaban con capuchas y uno disfrazado con una máscara de monstruo. Directamente me apuntaron con las armas y me pidieron la plata", contó Ricchiardi.

Los ladrones le ataron las manos. "Después fueron para atrás y trajeron al chofer, que estaba con en el hijo, y también los maniataron", dijo.

Ricchiardi dijo que no suele haber dinero en efectivo en el lugar. Se llevaron billeteras, relojes y celulares de las víctimas.