Cuidemos la vida de todos

¿Cómo es posible que las autoridades no controlen el transporte de familias enteras en motos y ciclomotores? Transito diariamente esta ciudad y observo con preocupación y asombro la cantidad de chicos de corta edad y de bebés transportados por mayores en estos insegurísimos vehículos de dos ruedas. He visto muchas veces que la madre lleva un chico en cada brazo en la parte de atrás del asiento y otro entre ella y el conductor del vehículo. Ni hablar del uso del casco. El Estado debería actuar en este tema porque es una cuestión primordial de preservar la integridad física de los ciudadanos y sobre todo de las inocentes criaturas que no pueden elegir. Pero si aun eso no conmueve, hagámoslo por una cuestión última, si se quiere mezquina y miserable: la económica. ¿Cuánto le cuesta al Estado la atención de los accidentados en los hospitales públicos? Además de otras trágicas consecuencias sociales y familiares que resultan de accidentes que pueden evitarse. Cuidémosnos, cuidemos nuestra calidad de vida, que la frase acuñada por el gobierno municipal “Rosario la mejor ciudad para vivir” tenga algún sentido. Que no resulte la mejor porque nadie controla y podemos hacer lo que se nos antoje sin respetar la ley.

Aldo Tramontini, DNI 10.409.587