Los efectos del cambio de paradigma

Desde hace dos décadas la industria automotriz vive una profunda transformación, con la concentración de marcas, cambios en los modos de producción y una creciente participación de jugadores globales provenientes desde Asia.

En la actualidad existen sólo una decena de compañías que manejan el mercado vehículos, las que ganaron, a su vez, mayor poder de negociación frente a sus proveedores.

En ese contexto, la industria autopartista no quedó exenta de los cambios, que en Argentina se aceleraron con la fuerte apertura de la economía durante la década pasada, proceso que dejó -salvo aquellas firmas que lograron internacionalizarse- un sinnúmero de pymes en el camino o sobreviviendo en el mercado interno de reposición.

Este es un fenómeno que hoy enfrenta a los autopartistas locales con nuevos desafíos producto del desarrollo tecnológico de los últimos años, como por ejemplo, la aparición de vehículos híbridos, eléctricos, celdas de combustible, utilización de materiales más ligeros y una creciente participación del mundo del software en los autos.