El clásico y más

Central: Pipo quiere cortar una racha y pelear un título

Gustavo Conti / Ovación

Es ambicioso, aunque eso no quiere decir que abandonó su perfil bajo. Desde que llegó a Central no hizo nada para que se lo asocie a la demagogia y con el gran triunfo en el clásico sorteó una prueba de fuego decisiva, con su exposición pública en la ciudad. Pero eso no quiere decir que no se trace nuevas metas. Una de ellos surgió sin necesidad de mencionárselo: el de la posibilidad de cortar una racha de 24 años sin ganar un encuentro posclásico. El otro va asociado más allá: conformar un equipo que de veras pueda salir campeón.

No pareció aprovechar el momento, simplemente lo dijo: "Debemos mejorar cosas y no nos aferramos sólo a ganar un clásico. Nuestras aspiraciones son que Central salga campeón. No puede ser que este club lo haga cada diez o doce años".

¿Se agrandó Chacarita? Se diría que no. "Fue un triunfo muy importante, sobre todo por la forma en que se logró. Y tal vez vaya cobrando más dimensión. Pero la forma de ser de este cuerpo técnico es así. Somos de bajo perfil y no nos creemos mejores ahora que ganamos. Lo que más alegra es que la gente se sienta conforme con el equipo. Y si eso se va acentuando, te ganás su cariño sin hacer demagogia. Uno quiere ser reconocido pero no en base a inflar cosas. Dios quiera que vaya en camino a eso pero dependerá de lo que hagamos de acá en más".

Y como dice que "hay que entender que lo que importa es la pelota que viene y el partido que viene", que "no importa el pasado", va por más objetivos. El que más lo seduce, el del campeonato, pero como sabe que ese camino se construye en breves capítulos, plantea el del próximo partido ante Racing (sábado 18.20, en Avellaneda, por TV): "Central no gana los partidos después de los clásicos y por eso hay que hacerlo ahora y revertirlo".

Nadie le había preguntado por la cuestión, el tema surgió solo. La importancia radica en que si Central gana, superaría a Miguel Russo, a quien igualó en eso de ganar su primer clásico. Sería el primer técnico desde 1982 (ver aparte) que lo logra. "Me acabo de enterar de eso. Por eso sería muy importante ganarle a Racing, para que tenga más valor aún la victoria en el clásico", añade sin entrar nunca en los beneficios personales, aún reconociendo que ahora "soy consciente de que tengo más plafón", con la hinchada.

La mejor semana de Gorosito en Central abortó además los fantasmas sobre su continuidad que asomaron mucho más allá del realismo, sin filtro ni otra intención, del Kily González. Y Pipo, amén de asegurar que la dirigencia y el grupo inversor le habían dado su total respaldo la semana pasada, confió lo obvio: "Esta victoria es muy importante para la tranquilidad del grupo hacia nosotros". Eso es hoy la gran secuela del clásico según Pipo. Lo demás vendría por añadidura.

Con la tranquilidad de la victoria. Pipo Gorosito comenzó ayer su mejor semana por el triunfo ante Ñuls.