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miércoles,
18 de
octubre de
2006 |
"Decir que nos salvamos de la osteoporosis es como pensar que evitaremos las arrugas"
Alfredo Rigalli, organizador del Congreso de Osteología, derriba mitos y fija pautas para demorar sus efectos
Clarisa Ercolano / La Capital
"Todos vamos a tener osteoporosis pero no quiere decir que todos nos vayamos a fracturar", explica a La Capital el investigador rosarino Alfredo Rigalli, encargado de la organización del Congreso Argentino de Osteología que se hará en Rosario mañana y el viernes. Para el experto, hay que apuntar a la nutrición y a la vitamina D y sus beneficios en torno a la absorción del calcio, para minimizar los riesgos. "La osteoporosis es una enfermedad y como tal, representa un negocio", afirma, y explica que "las mujeres luego de la menopausia empiezan a perder masa ósea y la industria farmacéutica le otorga mucha importancia al tema porque el sexo femenino representa el 50 por ciento de la población mundial".
El XXIII Congreso Anual de la Asociación Argentina de Osteología y Metabolismo Mineral (Aaomm) convocará a más de 300 investigadores y profesionales del país y del exterior, quienes se reunirán para presentar los últimos avances en la materia. Rigalli, químico e investigador del Conicet, y presidente de la comisión directiva, adelantó que durante el encuentro se presentarán trabajos de investigación, habrá simposios, mesas redondas y conferencias de actualización en temas de osteología y metabolismo mineral. Este año el eje estará centrado sobre las enfermedades relacionadas con el metabolismo óseo, no con lo traumatológico, y fundamentalmente, con la nutrición del hueso, "un tema sobre el que hay poco desarrollo y para que la gente sepa que es importante ingerir ciertos alimentos para prevenir la osteoporosis".
"Ningún tratamiento destinado a mejorar la calidad del hueso sirve si no hay vitamina D. El el hueso anda bien si le doy calcio, pero la vitamina D permite que el calcio atraviese la barrera del intestino y se incorpore a los huesos", explica Rigalli, y agrega que es muy fácil incorporarla al organismo, ya que "con estar 15 minutos al sol por día es suficiente".
La importancia de la prevención
Decir que uno se va a salvar de la osteoporosis es, según el investigador, "como afirmar que alguien no va a tener arrugas; la osteoporosis es la pérdida del material que constituye al hueso, el hueso se adelgaza mucho y esto se traduce en fracturas, la idea es tratar de prevenirla lo más posible, hay que juntar la mayor cantidad de masa ósea, es como ahorrar plata para la jubilación", indica. "Hasta los 25 años inclusive, se incrementa la cantidad de calcio en los huesos siempre y cuando se ingiera la cantidad correcta, y que uno se exponga lo suficiente al sol y no fume ni beba alcohol en demasía. Todos perdemos hueso pero si partimos de un valor más alto de material óseo acumulado, probablemente nunca se llegue a fracturar".
El calcio debe incorporarse durante toda la vida, sobre todo desde la alimentación. También puede hacerse en comprimidos, pero Rigalli aclara que estos "no tienen la misma biodisponibilidad".
¿Cómo se incluye la cantidad necesaria de calcio?: con la ingesta de un litro de leche, 200 gramos de queso o dos o tres yogures por día. "Si bien el comprimido tiene todo el calcio que uno precisa, no se disuelven con facilidad en el aparato digestivo y, en muchos casos, pasan de largo, sólo que esto no se dice", advirtió el profesional.
Otro aspecto a tener en cuenta es la actividad física, que es la única que puede fortalecer al hueso. "Sucede igual que con el músculo, si ingiero calcio y no me movilizo, no pasa nada, es como con el músculo, si tomo suplementos y aminoácidos pero no voy al gimnasio, no pasa nada", advierte el químico.
Ponerse en guardia
Cuando se supera la barrera de los 30, es conveniente incrementar la ingesta de calcio, según explica Rigalli, porque "si disminuye, los sensores que hay en el organismo detectan que hay menos calcio en sangre, y una hormona se encarga de disolver el hueso para poner calcio en la sangre", dice, y remarca que las personas con huesos de contextura pequeña "deben tener más cuidado".
Respecto de los tratamientos farmacológicos, el del disfosfonato es el más difundido. La droga frena el accionar de las células que degradan el hueso, pero si bien evita que se pierda masa ósea, también impide que lo que está dañado se repare. "No veo que tenga un efecto maravilloso", se anima a decir, y agrega que "la célula deja de actuar sobre el hueso sin dañar pero a la vez detiene la recuperación de los daños que ya están presentes en el esqueleto".
El investigador del Conicet afirma que actualmente no existen tratamientos que frenen el avance de la enfermedad. "Sólo hay dos tratamientos capaces de formar hueso: uno es el flúor, pero no se sabe si lo que forma es resistente, y además, como no es caro, no interesa su producción; el otro es la hormona paratiroidea que si bien repara los huesos, tiene costos altísimos y sólo se usa en situaciones muy críticas".
Pero sin dudas, el climaterio, es la etapa crucial para la aparición de la osteoporosis, luego de que la protección natural que brindan los estrógenos, decae. "La absorción de calcio disminuye, por eso hay que levantar mucho su ingesta, teniendo en cuenta que el estrógeno ya no ayuda", apunta el investigador, aunque también aclara que la mujer debe aumentar sus cuidados en la edad fértil: "lamentablemente, el bebé se nutre de la madre, porque por más que la madre no ingiera calcio, el bebé se lo saca igual, y por eso la embarazada pierde hasta los dientes y la masa ósea de su cara".
Respecto de la teoría que dice que el organismo de las personas adultas no está preparado para digerir la leche, Rigalli confirma que un 30 por ciento de personas tiene este problema porque la enzima encargada de digerirla se pierde debido a que cada vez la gente toma menos leche. Por esto es que pide a los que tengan este problema que intenten volver a incorporarla en pequeñas raciones: "de a una cucharada por día", aconseja.
Cabe destacar que la Asociación Argentina de Osteología y Metabolismo Mineral -conformada por 121 miembros titulares y 4 miembros honorarios- cuenta entre sus filas a médicos que realizan tareas asistenciales en reconocidos hospitales del país en las ramas de la endocrinología, radiología, osteología y nutrición, además de bioquímicos, biólogos y odontólogos. Sus asociados realizan investigaciones en las áreas de la biología molecular, biomecánica, nutrición, oseointegración, absorción de calcio, osteopatías, acción de hormonas relacionadas al metabolismo fosfocálcico, efecto de drogas novedosas en el tratamiento de osteopatías, microarquitectura ósea, desarrollo de drogas osteotrópicas. Los resultados de estas investigaciones están publicados en las más prestigiosas revistas médicas del mundo.
El investigador rosarino destacó que esta reunión anual coincide con la celebración del Día Mundial de la Osteoporosis (el 20 de octubre) y con el Año Mundial de la Nutrición. "En todo el mundo se programaron actividades y campañas de difusión coincidente con este día, y aquí en Rosario haremos lo propio".
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Un litro de leche por día, la medida justa de calcio para fortalecer los huesos.
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