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 sábado, 14 de octubre de 2006  
Un procesado por crímenes de lesa humanidad rompe el silencio

El detenido represor Eduardo Curro Ramos rompió el silencio para cuestionar a la Justicia federal, asegurar que en Santa Fe "operaban, y operan, cinco servicios" de Inteligencia y sembrar dudas respecto de la desaparición de Jorge Julio López, testigo clave del caso Etchecolatz.

Es uno de los nueve procesados en la causa que investiga la represión ilegal en Santa Fe y está preso desde principios de 2005. "Soy el único de los detenidos que habla: fue un acuerdo entre nosotros", dijo Ramos por teléfono, durante una entrevista con Cablevideo.

Si bien la Justicia federal lo encartó por privación ilegítima de la libertad, vejaciones, apremios ilegales, coacción y tormentos, considera que "no se investiga con seriedad, con responsabilidad".

"El juez (Reinaldo Rodríguez) me detiene dos días antes de la indagatoria. Cuando fui a declarar empezamos a los gritos y le aporté mucha documentación que no fue tenida en cuenta", recuerda.

Ramos, ex integrante del Servicio de Informaciones de la policía provincial, también afirma: "No se puede entender cómo por esta causa hay sólo nueve detenidos cuando en Santa Fe existen cientos y cientos de represores".

"En Santa Fe operaban, y operan, cinco servicios. Mi trabajo apuntaba básicamente al ambiente universitario. Hacía informes ambientales, que tenían que ver sobre todo con la marcha de las asambleas. También me infiltré en el ERP. Fue en un congreso de Rosario", reveló.

Ramos fue exonerado de la policía por integrar una banda de uniformados que asaltaban moteles y estaciones de servicio. "Sí, fueron pecados de juventud", aseveró, al tiempo que admitió que lo hizo en calidad de autor.

Pero también analizó la coyuntura: "Investigué mucho. Queremos la reconciliación. No se puede vivir de la provocación. Fíjese, ¿qué pasó con López? Hay quienes opinan que lo hizo la ultraizquierda de entonces para responsabilizar a la ultraderecha".

"Es un juego tan tenebroso. ¿El Estado? Sí. Hay quienes sospechan que la Side pudo estar en el tema. Qué peligroso, ¿no?", remató.
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