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sábado,
14 de
octubre de
2006 |
Indagarán a
la cúpula del
hospital Francés
La Justicia citó ayer a prestar declaración indagatoria a la cúpula del Hospital Francés por los incidentes ocurridos esta semana en el centro asistencial porteño, en el marco de una protesta gremial, informaron fuentes tribunalicias.
La citación fue ordenada por el juez de instrucción porteño Javier Anzoátegui y afecta al interventor judicial José Luis Salvatierra, y a los directivos del hospital Walter González, Alejandro y Jorge Silento, Carlos Enrique Ballesteros y Carlos Alberto Riquelme.
De acuerdo con lo informado por los voceros, el delito que se les imputa a los directivos es el de "instigación a la violencia", al igual que al resto de los acusados.
La Justicia informó que la cúpula deberá declarar durante la semana próxima, junto a los 35 detenidos durante los graves incidentes del martes último, registrados cuando unas treinta personas, entre ellas militantes kirchneristas vinculados al PJ porteño, desalojaron por la fuerza a empleados.
La medida se conoció luego que los trabajadores expresaron su acuerdo con la propuesta oficial para crear un fondo fiduciario que permita solucionar el conflicto en el centro de salud, y tras anunciar que mantendrán manifestaciones de protesta, para reclamar la destitución de "toda la intervención".
Exigen que se vayan
Médicos, no profesionales y afiliados resolvieron en una asamblea conjunta pedir "mayores precisiones" al gobierno sobre "los plazos y el monto" de la propuesta, y ratificaron su exigencia de que Salvatierra y sus asesores, ahora acusados, abandonen la dirigencia del hospital.
El gobierno nacional y delegados gremiales se reunirán el martes en Casa Rosada para continuar la negociación, mientras la situación en el hospital comenzó a normalizase ayer con el arribo de insumos y la reapertura de guardias, maternidad y atención a internados.
El director médico del hospital, Alejandro Silento, uno de los que deberá comparecer, acusó a dirigentes gremiales de evitar el ingreso de insumos a un anexo que la empresa tiene en el barrio porteño de Villa Crespo.
La aparición de Silento pretendió despegar la vinculación del gobierno nacional con los hechos de violencia de esta semana, por la difusión de imágenes que muestran la relación con el oficialismo de Sergio la Tuta Muhamad, miembro del "grupo de choque" que causó los desmanes.
"No se pudieron recibir insumos porque dijeron que se los iban a robar", sostuvo Silento, quien ratificó que el día previo a la batahola del martes fue "agredido por la comisión interna". (DyN)
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