Una fuerte nevada paraliza el oeste neoyorquino

Hasta 61 centímetros de nieve obligaron ayer a clausurar carreteras y dejaron sin electricidad a unas 230.000 personas en el oeste del Estado de Nueva York, además de dejar paralizada la localidad de Buffalo, ya que las autoridades prohibieron la circulación de vehículos particulares en la región.

La nevada, acompañada de truenos y relámpagos, cubrió de blanco Buffalo y las zonas aledañas en la mañana de ayer. Un tramo de 170 kilómetros en la autovía estatal Thruway, permaneció cerrado debido a la copiosa nevada.

"Todo ha quedado paralizado", afirmó David Ries, propietario del restaurante Woodlawn Diner, en Buffalo. "Hay muchas personas que no siquiera deberían abandonar sus casas debido a la prohibición de manejar".

Los árboles y arbustos que todavía no han perdido sus hojas se doblaron y quedaron aplastados por el peso de la nieve. Las manzanas y calabazas aún no cosechadas quedaron enterradas bajo el manto blanco y los escolares que comenzaron la semana con el feriado del Día de Colón la terminaron con el cierre de sus escuelas debido al temporal. La primera nevada de la temporada en el occidente del estado de Nueva York dejó sin electricidad a más de 230.000 personas. (AP)