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sábado,
16 de
septiembre de
2006 |
Tacuara y a la bolsa
Newell's triunfó con tres goles del paraguayo Cardozo
Mauricio Tallone / Ovación
Para Newell's no se trataba de un partido de rutina. Es que precisaba un triunfo, más allá de la cuestión del juego, para darse un baño de optimismo luego de los malos presagios que acompañaron sus últimas presentaciones. Por eso, lo menos que se le podía pedir al equipo de Pumpido era que estableciera las reales diferencias que lo distancian de Quilmes. Y lo hizo con una soberbia función unipersonal de Tacuara Cardozo. Es imposible no explicar la victoria rojinegra a partir de los tres goles del paraguayo.
Precisamente la vida le sonrió muy temprano a Newell's. Bastaron 12 segundos para que Cardozo despabilara a su equipo y lo condujera al éxito. El delantero recibió de Peralta, giró con la marca encima y cruzó la pelota dejando en posición de estatua a Derlis Gómez.
El partido ya tenía un dominador psicológico, lo cual fue casi irreversible porque un par de minutos después otra vez Tacuara estiró la ventaja con un cabezazo luego de un centro de Cejas.
Es cierto, Quilmes no resignó dignidad pese a la desventaja pero siempre jugó a remolque del plan de Newell's. Y eso que descontó enseguida producto del penal que Spolli le cometió a Giménez, quien lo transformó en gol.
Para ese tiempo, la visita ya se había apoyado en dos movimientos bien definidos. Fue electrizante cuando Cejas y Peralta desbordaban por sus bandas y los avances terminaban en Cadozo o Salcedo. Y el equipo fue algo moroso para contener la arremetida del local, que llegó con arrestos de Chatruc y un par de cabezazos de Luna. En cada oportunidad apareció la respuesta de Villar.
Seguramente la arenga de Pumpido en el entretiempo surtió el efecto esperado porque antes de los 10' llegó otro golpe estratégico de Newell's. Como no podía ser de otra manera, el encargado de facturar fue Cardozo, quien con un tiro libre acomodó la pelota bien abajo del palo izquierdo de Gómez.
El 3-1 empujó a Newell's a mirar todo desde otra perspectiva, más allá de que era previsible que Quilmes se perdiera en sus intentos antes de firmar su capitulación.
Pumpido se dio cuenta de que el partido así planteado requería algo más de enjundia y reforzó la defensa con el ingreso de Rivera y el medio con la entrada de Lucero. Eso sí, se guardó la carta de Flores para estirar en el tiempo adicional.
Por eso el gol de Fernando Crosa (el ex Newell's fue silbado por los hinchas visitantes) tras un doble cabezazo de Juárez y Giménez, terminó convertido en una circunstancia anecdótica.
Este Newell's ya había hecho suficientes méritos para quedarse con la última palabra. En realidad, el que merece por encima de todos pasar por caja y cobrar premio triple es Tacuara Cardozo. Nadie mejor que él volvió a sentirse tan a gusto con esta victoria.
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Fotos
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Noche paraguaya. Cejas abraza a Cardozo.
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