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miércoles,
13 de
septiembre de
2006 |
Hadas marinas. M. Night Shyamalan habla de "La dama en el agua", que se estrena mañana
"Intenté destacar la fe y la misión
que cada uno tiene en este mundo"
El director dijo que el filme se diferencia de sus trabajos anteriores en la apelación que hace a la inocencia
Martín González Oliva
El director indio-estadounidense, M. Night Shyamalan (Manoj Nelliyattu Shyamalan), que hace seis años se dio a conocer a nivel internacional con la taquillera "Sexto sentido", vuelve al ruedo con "La dama en el agua", que se estrena mañana en los cines rosarinos. La película, que el cineasta consideró "un cuento de hadas", narra la historia del portero de un edificio que descubre a una ninfa marina en la piscina del complejo. El filme, como en otras ocasiones, promete sorprender con una trama en la cual personajes con vidas corrientes se ven de pronto sumergidos en una trama fantástica. "Me identifico con esa clase de personajes que no tienen rasgos notables ni en su vida ni en su aspecto, pero que son capaces de experimentar cosas verdaderamente extraordinarias", dijo el director sobre su nuevo filme.
-¿En qué se inspiró para "La dama en el agua"?
-Mi narración es fantástica. Es una película que hay que verla con inocencia. Todos los cuentos clásicos nacieron porque alguien levantó los pies del suelo. La historia está inspirada en los cuentos de origen indio que les relato a mis hijas. De hecho "La dama en el agua" nació de un cuento de hadas. A medida que se las contaba me iba entusiasmando más y más. Por otro lado, me gusta mucho la idea de seguir reglas, de ir construyendo la historia de acuerdo con ciertas leyes. De todo eso nació la película.
-¿Por qué eligió a Paul Giamatti para el rol protagónico?
-Elegí a Paul Giamatti después de verlo en "Esplendor americano" y "Entre copas". Además de que fueron dos muy buenas películas Paul estaba realmente excelente. Conclusión, que no pude evitar enamorarme de él y de su trabajo. Pero además tiene el aspecto de tipo común y a mí lo que me interesa es ver cómo reacciona una persona común ante circunstancias totalmente extraordinarias. Me identifico con esa clase de personajes.
-¿Qué lo llevó a girar del thriller psicológico que tan buenos resultados le había dado con "Sexto sentido", "El protegido" o "La aldea"?
-Básicamente me considero una persona espiritual, aunque no religiosa. En este caso lo que intenté hacer es destacar la fe, pero no la fe religiosa sino la fe en sí mismo, y la misión que cada uno de nosotros tiene en este mundo con lo cual, es verdad, di un giro en en el tipo de películas que había hecho hasta ahora. De todas maneras en algún punto sigue siendo un thriller fantástico con una buena dosis de humor y en algún otro momento roza el género del suspenso. Pero creo que esta película puede verse como una metáfora sobre los sentimientos y el origen del hombre, sobre nuestras creencias, una fábula con personajes fantásticos, aunque normales en su apariencia.
-¿Cómo se inserta este filme sobre un cuento de hadas en un momento histórico complejo como el que atraviesa el mundo?
-Bueno, a veces creemos que es una mera fantasía recrear el mundo de los cuentos, pero es un error, pues en los cuentos podemos encontrar un gran alivio y hasta me atrevería a decir que un camino que dé sentido a nuestra vida. Por eso en mis películas los personajes suelen recobrar la fe después de haber sufrido mucho. La solidaridad, el trabajo en equipo tienen también una gran importancia. Los protagonistas de la película forman parte de una comunidad de lo más heterogénea. Están separados por la lengua, la religión o la forma de ser, pero acaban unidos por un objetivo común como es salvar a la ninfa que vino a ayudarles. Demuestran que unidos pueden lograr sus objetivos y ayudarse mutuamente.
-¿La actitud de los personajes no puede interpretarse como algo que es fruto de una imaginación en algún punto inocente?
-En principio este filme tiene una dosis de ironía. Es algo necesario para contar historias en el cine, pero también sugiere mirar la vida con ojos de niño, porque es lo que han hecho siempre los grandes maestros. Yo siempre les digo a mis hijas que no pierdan nunca la inocencia y la mirada infantil, porque ser inocente no es lo mismo que ser débil o un frívolo. Al contrario, creo que ser inocente nos da más fuerza. Justamente lo interesante es que, tal vez, todo lo que les pasa a los personajes es simplemente fruto de la imaginación, pero no deberíamos olvidar que sin imaginación y una dosis de inocencia, la vida y la experiencia del ser humano se puede convertir en un acontecimiento insoportable.
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Fotos
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Paul Giamatti y Bryce Dallas Howard encabezan el reparto.
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