La gente le dio un marco especial y colmó el Coloso

Alrededor de 35 mil simpatizantes palpitaron un duelo muy caliente

El marco que presentó el Coloso anoche fue impresionante. Los hinchas de Newell's y Racing colmaron el estadio del parque Independencia y alentaron a sus equipos durante toda la noche. Los rojinegros desplegaron su mayor colorido en la popular del hipódromo, donde colgaron banderas, agitaron sombrillas y encendieron bengalas. Mientras que por el lado albiceleste, los trapos tapizaron el alambrado que da espaldas al Palomar y para recibir al elenco de Mostaza cubrieron la tribuna de globos celestes y blancos con forma de bastón.

El trámite intenso del partido, aunque anodino por momentos, provocó que hasta los plateístas vivieran las acciones de pie, con los dientes apretados y masticándose las uñas, pero conservando a lo largo de todo el duelo incansables cánticos para acompañar a sus jugadores.

Cada fallo del árbitro generaba un aplauso o una queja, según era beneficiado uno u otro equipo. En especial los hinchas leprosos estaban más celosos con los fallos de Juan Pablo Pompei.

Ambas hinchadas motivaron permanentemente a sus jugadores, como una forma de exigirles la suma de tres puntos para seguir entre los protagonistas del torneo. Además, el trámite friccionado entusiasmaba al público, que celebraba las entradas fuertes de sus muchachos.

El enorme despliegue policial complicó la llegada de los hinchas al estadio, ya que debieron dejar sus vehículos a varias cuadras del Coloso y luego emprender la caminata hasta la cancha.

Newell's fue recibido a todo color.