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sábado,
22 de
julio de
2006 |
Artesanos: permiso para imaginar
Mesas y sillas infantiles ahora también pueden ser didácticos y fomentar el arte a través del juego
Paulina Schmidt
"A través del diseño de muebles, quisimos poner al alcance de los chicos juegos y materiales que estimulan la creatividad y los invitan a imaginar, soñar y comunicarse expresando emociones". Esta original propuesta que sumerge a chicos y grandes en el mundo de las artes, surgió de la mano de Samanta Colautti y Cristian Corvalán, quienes pensaron que pintar, actuar o modelar podrían estar orientados a la fabricación de muebles infantiles. Los jóvenes socios y amigos, charlaron con Estilo acerca de la fabricación de muebles que poco tienen que ver con el mercado convencional.
Hasta el presente, las mesas y sillas infantiles sólo se diferenciaban por su tamaño, color o dibujos, pero muy distinto es aprovecharlos como generadores de actividades y que además llamen la atención. "Muchas veces los chicos manipulan los objetos de adultos o bien juguetes que no estimulan su imaginación. Así es como nos atrevimos a diseñar algo diferente. Nuestra propuesta consiste en lograr un mueble artesanal que invite a jugar y ofrezca las herramientas para estimular la veta artística", dijeron Samanta y Cristian, creadores de "Ay Chumba", el nombre que identifica a esta nueva línea de muebles, en alusión a una pegadiza melodía.
Los chicos podrán modelar o pintar sobre superficies con espacios especialmente asignados para trabajar y colocar los elementos. Los muebles artesanales fueron diseñados con principios didácticos aplicados a la forma, el color y las siete variantes del arte.
El set de pintor, actor, escritor y el teatro de títeres son algunas de las propuestas que más entusiasman a chicos y grandes, mientras que el atril y la banqueta fueron la primera creación y quizás la más emblemática, porque transporta al niño a la posibilidad de pintar. En esta instancia el padre sueña e imagina las habilidades que tendrá su hijo.
Colautti, de 27 años y Corvalán de 31, también crearon a Lucio, un singular personaje que se asemeja bastante a un pato y aparece en todas las mesas y sillas. "Aunque siempre tuvimos la idea de hacer algo distinto con respecto al arte, nos llevó un tiempo descubrir hacia dónde íbamos. El contacto con grupos de chicos, nos permitió conocer sus preferencias y sobre todo, qué cosas les podía llamar la atención", reconocen.
"El objetivo era lograr un juego infantil donde los chicos puedan crear y agilizar la mente en compañía de sus padres. La idea es que el mismo chico que se reúne con sus amigos en un ciber, pueda también entretenerse con un juego de mesa que despierte sus sentidos y genere compañerismo".
Seducir a grandes y chicos
La reciente muestra Estilo-Lares fue la vidriera que les permitió a estos jóvenes lanzar su nuevo emprendimiento y dar rienda suelta a sus deseos de hacer algo diferente en materia de entretenimiento. Si bien habían trabajado en este proyecto por más de un año, Corvalán como arquitecto y Colautti de diseñadora gráfica, coincidieron que la muestra del Patio de la Madera era el momento indicado para exponer su trabajo.
"Las jugueterías casi siempre exhiben algún cartel que prohíbe tocar o apoyarse, estableciendo cierta distancia entre el juguete y el chico. Por eso, en la muestra instalamos un showroom que favoreció el acercamiento con los juegos de mesa, y nos permitió evaluar el interés que despertaba la propuesta en el público bajito", explica Corvalán, siempre acompañado e inspirado por su hija Martina de dos años, quien puso a prueba cada uno de los diseños.
Pero estos muebles didácticos no tienen en cuenta sólo a los más pequeños. A partir de los tres años y hasta los doce, los niños acceden a variadas alternativas como actuar o jugar en una cancha de fútbol de botones. "Los chicos de ahora pasan la mayor parte de su tiempo libre frente a una computadora. Es preciso ofrecerles juegos entretenidos y las herramientas para que también puedan usar la imaginación", agregó Colautti.
Aunque los juegos resulten atractivos, disciplinados e ingeniosos, la presencia y participación de los padres es crucial para el desarrollo y el incentivo de las potencialidades. "Los grandes deben sentirse incluidos, participar y expresarse libremente en un momento especial de comunicación y juego", apuntan.
La audacia de los colores
La línea de muebles artesanales es diseñada teniendo en cuenta principios didácticos aplicados a la forma y el color. Sin tonos primarios ni pasteles, el verde, magenta y el naranja entre otros, resuelven con intensidad la combinación de esmaltes sintéticos.
El material empleado para su fabricación se lo conoce como fibrofácil (de 15 milímetros de espesor), y según Corvalán, "es una madera fiel, duradera, que resiste los avatares de los chicos, siempre y cuando se la utilice de manera correcta".
En cuanto a la forma, todas las mesas de actividades son redondas, porque favorecen la integración del grupo. Además, bajo la estricta condición de que los mobiliarios sean compactos, cualquiera de ellos puede adaptarse a espacios reducidos.
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