El caso de un trío que usó a un bebé de escudo en barrio Ludueña

Encausaron a un chico por asaltar a una pareja y balear luego a una vecina

Tiene 20 años y lo acusan por robo agravado de arma de fuego, intento de sustracción de un menor y lesiones graves

Los tres chicos iban en bicicleta cuando se encontraron con una pareja y su bebé de 15 meses llegando a su casa del pasaje Madrid al 200, casi esquina Humberto Primo. Entonces no dudaron y fueron a asaltarlos. Uno de los ladrones tomó a la criatura a modo de escudo humano, pero la reacción de los vecinos los puso rápidamente en fuga. La retirada casi desembocó en una tragedia cuando otro de los delincuentes efectuó un disparo de arma de fuego para cubrirse y le pegó un balazo en el pecho a una vecina. Por ese hecho, uno de los presuntos autores fue procesado por delitos como robo agravado por el uso de arma de fuego, intento de sustracción de un menor de diez años, tentativa de homicidio doblemente agravada y lesiones graves culposas.

El fallo recayó sobre Maximiliano Andrés Farías, apodado Baba, de 20 años, quien fue detenido a los pocos días de ocurrido el episodio a unas cinco cuadras del lugar del hecho. Por este caso también fue arrestado en su momento Luquitas, de 14 años, quien estuvo a disposición de un juez de Menores y declarado "inimputable" por su edad. El tercer cómplice está identificado, pero prófugo.

El suceso se registró el 31 de marzo pasado y desencadenó una serie de reclamos de los vecinos de barrio Ludueña por mayor seguridad y por la apertura de calles. Pocos días después, la policía realizó varios allanamientos e incrementó la presencia de patrulleros en toda la zona como para descomprimir la tensión.

El episodio comenzó cuando una pareja con una bebé de un año y medio llegaba a su casa del pasaje Madrid y Humberto Primo. Paola bajó con la nena en brazos para abrir el portón, mientras Roque aguardaba dentro del coche. Los delincuentes llegaron en bicicleta y sorprendieron a la mujer con las llaves del garaje.

Según los testigos, uno de los jóvenes fue directamente a arrancarle la criatura de los brazos. Fue en ese momento en que Roque salió del coche y comenzó a forcejear con uno de los maleantes. Como consecuencia de la pelea, la criatura cayó al piso y los delincuentes escaparon.

Entretanto, un vecino - uno de los tantos que presenciaron el atraco-, salió a correrlos y entonces uno de ellos abrió fuego. El balazo alcanzó a Griselda Digiácomo, de 22 años, quien estaba en la esquina de Madrid y Humberto Primo. La muchacha recibió el plomo en el tórax y tuvo que ser internada en grave estado en el Hospital Centenario.

Baba Farías fue detenido por la Brigada de Homicidios en base al testimonio de vecinos que fueron testigos del hecho. Durante la instrucción de la causa, dirigida por el juez Alfredo Ivaldi Artacho, el muchacho fue reconocido en rueda de detenidos como uno de los asaltantes. Según fuentes judiciales, los indicios reunidos en estos meses probarían la participación de Farías en el episodio, aunque no se pudo determinar si fue quien disparó el arma, hiriendo a Digiácomo.

Para el juez, por integrar el trío de ladrones Baba tiene que responder por una serie de delitos agravados por el uso de arma de fuego. Al robo, intento de sustracción de menor de 10 años y tentativa de homicidio, en este caso se le sumó la pretensión de buscar impunidad y lesiones culposas graves. La investigación registró una situación difícil con un testigo "de cargo" que actualmente cuenta con una discreta custodia policial debido a unas amenazas recibidas por presuntos familiares del hombre que aún está prófugo.

Griselda Digiácomom recibió un tiro en el torax en la secuencia que empezó el robo.