Condenan a dos etarras por un crimen que conmovió a España

Los dos autores del asesinato del concejal Blanco en 1997 recibieron penas 50 años de prisión por la alevosía demostrada

Madrid. - Dos miembros de la banda armada vasca ETA fueron condenados a 50 años de cárcel por el secuestro y asesinato con alevosía de un concejal del opositor Partido Popular en 1997. El homicidio desencadenó multitudinarias manifestaciones en favor de la paz y de repulsa a la banda terrorista,que se vio sorprendida por la reacción de condena social. Al mismo tiempo, continuaron los gestos y declaraciones políticas sobre el diálogo con el grupo terrorista iniciado por el gobierno español este jueves. El brazo político de ETA tuvo palabras de elogio hacia el gobierno español por su decisión.

Francisco Javier García Gaztelu, de 40 años, alias "Chapote", y su novia Irantzu Gallastegui, de 33 años, asesinaron en 1997 a Miguel Angel Blanco, un joven concejal del PP de la pequeña población de Ermua, en el norte del país. Los jueces aplicaron agravantes por la falta de piedad demostrada por la pareja con su víctima y por la actitud de burla hacia el tribunal y los familiares de la víctima durante el juicio.

La muerte de Blanco conmocionó a España y llevó a millones de personas a tomar las calles en algunas de las protestas anti-Eta más numerosas que se hayan realizado jamás. En una declaración final al terminar el juicio el 20 de junio, Gaztelu, antiguo líder de los comandos de la ETA, dijo en vasco que él y su novia admitían ser miembros de la organización. "No dejaremos de luchar por la libertad del País Vasco", declaró.

Gaztelu, Gallastegui y un tercer sospechoso secuestraron y asesinaron a Blanco. El tercer sospechoso, José Luis Geresta Múgica, se suicidó en 1999. En 2003 la Justicia condenó a un cuarto hombre, Ibón Muñoa, a 33 años de prisión por ser cómplice del homicidio.

Tras secuestrar a Blanco, la ETA fijó un plazo de dos días para matarlo, a menos que las autoridades transfirieran a los presos etarras de las cárceles de todo el país a las prisiones de la región vasca. El gobierno ignoró la amenaza.

Blanco apareció agonizante con dos heridas de bala en la cabeza y las manos atadas a la espalda el 12 de julio de 1997 y murió un día después. ETA ha asesinado a casi 1.000 personas desde que en 1968 comenzó su campaña terrorista.

El 22 de marzo pasado declaró una tregua y el gobierno socialista español anunció este jueves el inicio de negociaciones oficiales para que el grupo se disuelva. La ETA, en cambio, ha repetido en numerosas ocasiones que como mínimo sus objetivos son la autodeterminación, eufemismo de la independencia, la anexión de la vecina provincia de Navarra al país vasco, así como del sector vasco francés, y la amnistía de sus miembros presos.

En esta línea, Batasuna, brazo político ilegalizado de ETA, pidió al gobierno de Zapatero que no limite la decisión de los vascos en el proceso de diálogo que inició ahora con el grupo armado. Paralelamente, instó al presidente de Francia, Jacques Chirac, a que se implique en el proceso iniciado por el Ejecutivo español. ETA y Batasuna reivindican la independencia de lo que llaman Euskal Herria: el País Vasco, la vecina región de Navarra y el País Vasco francés.

El portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, aseguró en San Sebastián que Rodríguez Zapatero "ha realizado una declaración fundamental para la resolución del conflicto al asumir el compromiso de respetar lo que la ciudadanía vasca decida con respecto a su futuro". Otegi leyó una declaración en una conferencia de prensa en la que no se admitieron preguntas y en la que estuvo rodeado por los miembros de la mesa nacional de Batasuna.

"Chapote" y su pareja se burlaron de los familiares de Blanco.