| | sábado, 27 de noviembre de 2004 | |
El concejal que estrenó comedor
El jueves se pegó el faltazo a la sesión, y extrañó mucho. Es uno de los más regulares y tiene asistencia casi perfecta. Tal vez sea por la costumbre adquirida en su programa radial. Pero ayer se descubrió el misterio. Lo vieron deambular por los alrededores del Palacio con su mejor sonrisa. Y no es para menos. Parece que el hombre sigue invirtiendo en sí mismo y decidió renovar el "comedor". "No quiero ser un desdentado" dicen que decía unos días antes, de paso para gastar a algún empleado del recinto. Del otro lado le retrucaban que, como ahora se vienen las internas, el hombre quiere mejorar su mordida. ¿Será cierto?
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Los vientos de la fortuna
Un verdadero revuelo se armó entre los cuidacoches cuando el edil estacionó ayer su poderoso vehículo cuatro por cuatro frente al edificio del Concejo municipal. Ni lerdos ni perezosos los cuida, rindiéndole culto a la creencia popular de que lo novedoso viene con fortuna, hicieron una vaquita para jugar el número de la patente -el 916- a la quiniela. Eso sí, se encargaron muy bien de aclarar que jugarían el "número de la suerte" en la quiniela oficial y jamás en la clandestina. Como nunca falta en el lugar donde ocurrió el suceso uno de estos personajes acostumbrados a los comentarios al margen, sus palabras ácidas no tardaron en llegar mientras los "cuida" contaban lo que habían recaudado para la apuesta: "Pensar que hasta hace un tiempito estaban en la lona y ahora él maneja esta belleza que le pertenece a su señora", profirió el personaje. Desparramando ironía para quien quisiera escucharlo prosiguió: "¿Habrán aplicado los Consejos prácticos para mantener el equilibrio y pasar al otro lado, o acaso alguna pócima o pacto mágico con los dioses ha mejorado su suerte?". Aprovechando los fluidos favorables que despedía el vehículo, los "cuidas", contentos y presurosos, se fueron a realizar la apuesta. Ojalá que los vientos de la diosa fortuna soplen también para ellos.
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La propina que no tuvo quórum
La extensa mesa del restorán de la Aduana albergó a 73 comensales, que bebieron y comieron con fruición mientras desgranaban los avatares de la política provincial. Nada tan interesante, por cierto, como para descuidar el entrecot cocido a punto y el Norton. La mayoría de ellos eran legisladores de Santa Fe que participaron de la reunión de la región centro en el Concejo rosarino. A la hora de pagar, apareció un cheque oficial donde quedó estampado el monto: 1.264 pesos. De a poco, comenzó la retirada. Allí, casi de compromiso, alguien hizo notar que no habían dejado propina para los mozos. Pero no encontró eco. Nadie atinó a salvar la descortesía y a contribuir con dinero de su bolsillo. Como toda respuesta, quedó flotando una frase dicha como al pasar: "Que la propina también la deje Obeid". Esta vez, tampoco hubo quórum para la propina. |
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 | "Los bonistas italianos deben rectificar su actitud, porque no somos los argentinos de bien quienes los hemos afectado"
Presidete Néstor Kirchner
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| Sagitario - 22/11 al 21/12 | |  |
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