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 miércoles, 15 de septiembre de 2004

Golpes a Palos dentro de un motel
El jugador dijo que estaba con una joven y que presuntos allegados a la chica, por motivos que desconoce,fueron sus agresores. Sin embargo, la policía tiene testimonios de que sus acompañantes eran dos menores

Cuando el arquero de Newell's Old Boys Luciano Palos llegó a un motel de la zona oeste de la ciudad jamás imaginó que las horas de placer que pensaba pasar se transformarían en una noche de violencia. Es que cuando ya estaba dentro de la habitación asignada alguien golpeó a su puerta y al abrirla se encontró con un enfurecido grupo de entre 10 y 15 personas que lo atacaron a patadas, puntapiés y golpes de puño. Un llamado al Comando Radioeléctrico y el rápido arribo de un par de patrulleros al lugar puso fin a la agresión y provocó el desbande del grupo. Sin embargo, un hombre, sus dos hijos y una mujer (luego liberada), fueron detenidos y conducidos a la subcomisaría 22ª, donde se labran las actuaciones por daños, lesiones y robo. "En ese momento Dios me ayudó y estuvo conmigo", dijo ayer a la tarde el guardavallas mientras se reponía de los politraumatismos sufridos en la cama de un sanatorio céntrico (ver abajo).

Todo se desencadenó en el interior del motel 77, ubicado en Mendoza al 7700, poco después de la 1 de ayer. Hasta allí había arribado Palos en su auto y en compañía de una joven de 21 años, según su denuncia. Aunque los detenidos, dijeron voceros policiales, sostuvieron en sus primeras declaraciones a los investigadores que el arquero lo hizo en compañía de dos jovencitas, una de ellas menores de edad.

Fue precisamente este último dato el que desató la ira de los familiares y amigos de las chicas que, enterados de la cita amorosa que se estaba concretando, decidieron marchar hacia el alojamiento transitorio. "Nosotros dentro de la habitación no encontramos ni a una ni a dos chicas. Todo ocurría afuera de la pieza y en medio de una corrida hacia la calle. Tenemos las dos versiones y será la Justicia la que aclarará este tema", manifestó un vocero policial.

A lo largo de la jornada de ayer, los pesquisas del por ahora confuso e inédito hecho dijeron que Palos se había encontrado con dos chicas -al parecer de 16 y 18 años- en el minimarket de una estación de servicios ubicada en Mendoza al 6600. A una de ellas la conocía de tiempo atrás, a la otra la conoció anoche y con ambas había acordado la cita a través del chateo.

Luego de tomar algo, el jugador de 25 años y las jóvenes partieron a bordo del Fiat Brava color rojo del deportista en dirección al motel. Pero no llegaron a utilizar las instalaciones de la habitación. Un golpe a la puerta alteró el programa y fue Palos quien abrió. Entonces se encontró con el grupo de hombres y mujeres que "dijeron ser familiares de las jovencitas" y lo atacaron.


Tres detenidos que dan su versión
Nadie pudo explicar cómo tantas personas lograron ingresar al motel sin ser detectadas por los encargados del lugar. "Al parecer unos amigos de las chicas siguieron al jugador y le dijeron a los familiares que las pibas estaban en el motel", comentó una fuente ligada a la investigación. Palos comenzó a recibir una andanada de golpes de puño y puntapiés que sólo fue detenido por la llegada de los móviles policiales, cuyos agentes lograron apresar a Miguel F., de 48 años; a sus hijos Gabriel, de 21, y a otro de 17; y a una mujer de 47 años que después recuperó la libertad. Fueron ellos quienes sostuvieron que fueron al motel "para poner a salvo a una familiar menor de edad y a otra adolescente".

Mientras tanto, Palos fue derivado a un sanatorio y en el camino pudo contarle a la policía que no sólo fue agredido sino que los atacantes le habían robado un par de zapatillas y unos 50 pesos además de causarle daños a su auto.

En el caso tomaron intervención la jueza penal Carina Luratti, por el caso del robo y las agresiones físicas sufridos por el guardameta, y el juez de Menores Juan Leandro Artigas, quien deberá discernir si hubo o no una menor involucrada en el hecho.

"La investigación recién se inicia. Por ahora no se pueden hacer especulaciones porque no se descarta nada", concluyó un vocero de la investigación.

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Palos fue al Motel 77.

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