El gran desafío. El actor español interpreta la historia real del tetrapléjico Ramón Sampedro en la película "Mar adentro"

Bardem: "Este personaje me enseñó a aceptar mis limitaciones"

El actor español dijo que este complejo papel lo obligó a enfrentarse con sus propios prejuicios y miedos

Gabriel Rubio / La Capital

Después de meterse en la piel del poeta cubano Reinaldo Arenas en "Antes que anochezca", y del desempleado Santa en "Los lunes al sol", Javier Bardem se enfrentó a uno de los mayores retos de su carrera: interpretar la historia real de Ramón Sampedro, un tetrapléjico que luchó por que le aplicaran la eutanasia y que, al no lograrlo por la vía legal, finalmente murió gracias a la ayuda de sus amigos. El caso de Sampedro, que causó conmoción en los años 90, fue reflejado por el director Alejandro Aménabar en su nueva película, "Mar adentro", que acaba de estrenarse en España.

Para protagonizar "Mar adentro" Bardem debió ganar 20 años en la pantalla, muchos kilos y la dosis de paciencia infinita de alguien inmóvil durante casi tres décadas. Tetrapléjico desde los 25 años tras un accidente al tirarse al mar de cabeza, Sampedro sustituyó la fuerza física de su cuerpo por una sensibilidad emocional que supuso todo un reto para el actor español.

"Cuando te encuentras a un personaje como este, sin fisuras, te enfrentas con tus prejuicios y con tus miedos, y no puedes evitar juzgarle", reconoció Bardem. "Pero luego te centras en sus recuerdos, en los libros que escribió, y entiendes que lo que decía era muy sencillo: amo la vida, pero decido renunciar a ella. Su caso era una cuestión de libertad, no de derrota. Cuando entendí que su deseo era una vida más digna, entendí a Ramón", aseguró.

Según Bardem, "el actor pasa a veces por encima de los personajes, pero hay algunos que te transitan a ti, como el de Ramón Sampedro. Uno tiene que quitarse de en medio, dejar que te invada esa persona, con sus ideas, sensaciones, colores y sonidos", explicó.

El actor reconoció que tenía muchos temores antes de interpretar al personaje. "Sabíamos que el material era extremadamente delicado, por muchas razones. Por la persona de Ramón, por lo que significó para mucha gente, por lo que sigue viviendo esa persona en la memoria colectiva y por el tema que íbamos a tratar", recordó. Sin embargo, después lo invadió un extraño entusiasmo. "Sabía que el personaje era un regalo. Tenía la sensación de cometer un delito, me daban la oportunidad por la que cualquier actor en el mundo pagaría, o pegaría. Y yo quería estar a la altura de ese regalo", sostuvo.

Bardem aseguró que interpretar a Ramón Sampedro cambió muchos aspectos de su propia vida. "Me ha dado paciencia y tolerancia hacia mi persona -afirmó-. Este personaje me enseñó a aceptar con humildad todas mis limitaciones. Ahora soy más consciente de mi estatura personal y profesional. Es decir, soy capaz de tolerar mis restricciones".

Javier Bardem ante un nuevo reto actoral.