Sudán acepta bajo condiciones fuerzas de mantenimiento de paz

Abuja.- El gobierno sudanés, que hasta ahora rechazaba cualquier intervención militar en la conflictiva región de Darfur, dijo hoy que podría considerar el envío de fuerzas de mantenimiento de la paz bajo determinadas condiciones.

El jefe de la delegación del gobierno sudanés en las conversacioens de paz en Nigeria, Majzoub al Jalifa, dijo a la prensa durante un receso en el tercer día de encuentros que Jartum podría aceptar la presencia de fuerzas de paz de la Unión Africana si desarman tanto a las milicias árabes Yanyawid como a los grupos rebeldes locales.

La Unión Africana, que ha organizado las conversaciones en Abuja, ha propuesto el envío de 2.000 efectivos a Darfur con un mandato para desarmar a las milicias Yanyawid y proteger a los civiles.

En la actualidad, hay menos de 200 soldados de la UA en Darfur, que tienen el único cometido de proteger a los observadores militares encargados de supervisar el alto el fuego.

A primera hora del miércoles se dijo que las conversaciones de Abuja habían sufrido un retroceso cuando un líder de los rebeldes manifestó que la propuesta del gobierno de desarmar a los soldados rebeldes era "completamente inaceptable".

Sin embargo, ambos grupos finalmente cedieron a las presiones y, tras consultas con el gobierno nigeriano y delegados de la UA, los rebeldes continuaron su participación en las negociaciones.

"Antes teníamos reservas sobre la agenda, pero por el bien de las conversaciones hemos decidido dejarlas por el momento, hasta que lleguemos a ese punto", dijo el portavoz del MJI, Ahmed Togodt.

Los rebeldes habían acordado el martes una agenda de cuatro puntos que llevó al presidente de la UA, el presidente de Nigeria Olusegun Obasanjo, a decir que se estaban logrando avances.

Negociaciones previas colapsaron en julio, después de que los rebeldes se marcharan afirmando que el gobierno no hacía caso de sus demandas.

Entretanto, queda menos de una semana para que expire el ultimátum de Naciones Unidas al gobierno de Jartum para desarmar a las Yanyawid, consideradas las responsables de las atrocidades cometidas en Darfur, y para mejorar la situación humanitaria en esa región. (DPA)