| miércoles, 25 de agosto de 2004 | Aumenta el clima de tensión y temen violencia durante la convención republicana Empieza el lunes y policías neoyorquinos ya se preparan para contener las protestas contra la política de Bush Nueva York. - Activistas y policías se preparan para tensas jornadas y posibles actos de violencia en las calles de Nueva York, cuando cientos de miles se reúnan para protestar contra la guerra de Irak y las políticas del presidente George W. Bush en ocasión de la convención republicana que se realizará del 30 de agosto al 2 de septiembre. "La gente se ha estado reservando para esto", dijo Eric Laursen, uno de los organizadores de la campaña de desobediencia civil contra delegados a la convención y corporaciones que donan dinero al Partido Republicano.
Laursen dijo que las protestas en la convención del Partido Demócrata, que se realizó en Boston en julio fueron pequeñas porque la "nueva coronación de George W. Bush en Madison Square Garden es un acto contra el que la gente quiere pronunciarse".
No todos los (fundamentalmente) manifestantes izquierdistas respaldan al candidato demócrata John Kerry, pero la mayoría lo prefiere a George W. Bush, que aceptará la nominación de su Partido Republicano para un segundo mandato, en la convención.
Manifestantes de todo el espectro político marcharán el domingo cerca del sitio donde se realizará la convención, bajo el cartel: "El mundo le dice No a la agenda de Bush". Toda la semana, delegados y residentes se toparán con protestas que irán desde teatro callejero, hasta exhibiciones de arte y marchas.
Habrá protestas contra la política para el VIH/Sida del gobierno, los recortes de impuestos que favorecen a los más ricos y la creencia de que la guerra contra el terrorismo de Bush tras los atentados del 2001 ha restringido las libertades civiles y los derechos de los inmigrantes y ha militarizado a la sociedad estadounidense.
Algunos activistas dijeron que seguirán a algunos de los 4.853 delegados en la ciudad de Nueva York, los interpelarán y les entregarán folletos en los hoteles, espectáculos teatrales de Broadway y fiestas. Incluso se estableció un sitio en Internet para ayudar a coordinar "acción directa" durante la convención. Pero lo que preocupa realmente a las autoridades son las acciones no anunciadas de los anarquistas, que interrumpieron una reunión mundial de comercio en 1999 en Seattle y otros eventos de ese tipo.
En un esfuerzo por desalentar los actos de violencia, la administración del alcalde Michael Bloomberg ofreció descuentos en museos y hoteles para los que presenten sellos emitidos por la ciudad que dicen: "Bienvenidos los activistas políticos pacíficos".
Durante el ensayo de seguridad, los agentes del orden exhibieron sierras que dijeron usarán para cortar las cadenas de los manifestantes que se unan entre sí para bloquear calles, y también enseñaron con un megáfono para hacer anuncios a las multitudes. (Reuters) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Varias unidades custodian la sede de la convención. | | |