Año CXXXVII Nº 48410
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
La Región
El Mundo
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Escenario
Economía
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Salud 02/06
Autos 02/06
Turismo 30/05
Mujer 30/05
Economía 30/05
Señales 30/05


contacto

servicios

Institucional

 domingo, 06 de junio de 2004

Balance. El intendente repasa sus primeros 6 meses en la Municipalidad
Lifschitz: "Al final de mi gestión tendremos urbanizado el 40% de las villas"
Con un escenario nacional favorable, pronostica buenos tiempos para la ciudad

Carina Bazzoni y Diego Veiga / La Capital

A casi seis meses de haber llegado a la Municipalidad, Miguel Lifschitz se ríe cuando le recuerdan una frase de campaña: "Quiero sumarme a la lista de grandes intendentes que tuvo Rosario". De todas formas aclara que, "con más modestia", sigue pensando en dejar su impronta en la ciudad. Y para esto se planta en dos desafíos: "Al final de mi gestión tendremos urbanizado el 40 por ciento de las villas", promete a la par que advierte que "hay que darles un destino a los 80 mil jóvenes que en Rosario no estudian ni trabajan".

Sus otras dos preocupaciones son más conocidas: lograr el lobby para que la Legislatura provincial apruebe la reforma constitucional antes de fin de año -primer paso para que se pueda reconocer la autonomía de Rosario- y un aumento en la coparticipación. "Hay una situación favorable en el escenario nacional, y nuestra ciudad y la región están en condiciones de pegar un salto adelante interesante", señala.

-En plena campaña, el 4 de septiembre dijo que quería sumarse a la lista de grandes intendentes que tuvo Rosario. ¿Mantiene esta ambición?

-Fue antes de las elecciones. Pero sí, tal vez con más modestia, mi aspiración es poder concretar transformaciones importantes, como efectivamente lo han hecho otros intendentes antes que yo.

-¿En esa lista a quiénes rescata?

-Todos los intendentes que ha tenido Rosario desde la democracia han sido buenos. Por supuesto no me hago cargo de su posterior evolución política.

-¿Ve a Rosario igual que cuando asumió hace 6 meses?

-Hay algunos cambios positivos, tendencias. Algunas tienen que ver con un contexto nacional, y otras con la gestión municipal. En la gente se percibe un ánimo distinto que tiene que ver con una reactivación de la economía en algunos aspectos. Además hay una serie de ingredientes locales, una convicción de que estamos frente a una muy buena oportunidad para la ciudad. Y me parece que a caballo de un escenario nacional favorable, nuestra ciudad está en condiciones de pegar un salto adelante interesante.

-¿Cómo se saca rédito de esto?

-Hay cuestiones institucionales y políticas que hemos planteado. La primera es la necesidad de que se reconozca la autonomía municipal. Hubo un avance muy importante con la presentación del proyecto de reforma constitucional en la Legislatura y el consenso social que ha generado. La otra cuestión es la institucionalización de la región metropolitana porque hay que dejar de pensar a Rosario como una ciudad y empezar a verla como la cabeza de una región. Otro tema tiene que ver con los recursos que corresponden a los municipios, en particular a Rosario, que hoy deben ajustarse a lo que marca la legislación vigente. Así la ciudad contará con herramientas para realizar obras imprescindibles.

-Cuando comenzó a plantear el aumento de la coparticipación el ministro de Gobierno provincial, Roberto Rosúa, lo mandó a "pedir dinero a un familiar". ¿Qué receptividad tiene ahora este reclamo?

-Las discusiones por los recursos no son sencillas en ningún lado. Pero creo que hay un primer reconocimiento, incluso en el propio discurso del gobernador (Jorge Obeid) al abrir las sesiones ordinarias de la Legislatura. Hay un marco de diálogo para avanzar en este tema y esperamos tener respuestas rápidas.

-En relación a la autonomía, usted apostó fuerte a la realización de un plebiscito en este mes de junio. ¿Se arrepintió?

-Eso fue en marzo, cuando estábamos frente a un escenario donde la autonomía no estaba ni mínimamente instalada, ni se veía una voluntad del gobierno provincial de abordarla. A partir de allí, el propio gobernador elevó el proyecto de reforma constitucional a la Legislatura. Eso modifica el escenario. Ahora estamos articulando con un conjunto de instituciones de la ciudad una declaración que insista sobre la autonomía y comprometa a los legisladores a que el proyecto se trate este año.

-Entonces, ¿abandonó el plebiscito?

-No lo he descartado en la medida que sirva como expresión de voluntad popular, pero creo que en la medida en que haya voluntad política de impulsar favorablemente el tema de autonomía, no sería necesario.

-¿Cómo se asegurará de que efectivamente la reforma se trate este año?

-Primero apelo a la responsabilidad de los legisladores. De todas maneras estamos trabajando para hacer una fuerte campaña apoyando el tratamiento de la reforma constitucional, y por lo tanto avanzando en la opción de la autonomía.

-¿Por qué en el gobierno provincial molestó el plebiscito?

-No lo sé, pero valoro como positiva la decisión del gobernador de interpretar el reclamo.

-¿Qué implica lanzar una fuerte campaña para apoyar el tratamiento de la reforma?

-Vamos a hacer una fuerte tarea de divulgación, de debate y esclarecimiento de lo que es la autonomía. Es probable que muchas instituciones se expidan sobre este tema y hagan llegar sus inquietudes a la Legislatura.

-Cambiando de tema, cuando asumió anunció que su gabinete iba a comenzar a reunirse en los barrios ¿El Concejo le ganó de mano?

-Tenemos previsto hacerlo, pero más allá de que aún no empecemos la mayoría de los secretarios concurre asiduamente a todos los centros de distrito a reunirse con instituciones barriales.

-¿Cuál es el área de su gabinete que más le preocupa?

-Todas son importantes, a ningún área por menor que parezca hay que dejar de prestarle atención.

-Pero concretamente ¿a cuál de sus secretarios sigue más de cerca?

-Este año tenemos muchos desafíos por delante, como la organización del Congreso de la Lengua Española, y profundizar las políticas sociales fundamentalmente en el área de los jóvenes que son nuestra especial preocupación. Si no hay un trabajo serio y profundo en este sector los problemas de violencia e inseguridad no tienen solución. No es sólo cuestión de incrementar la acción policial o aumentar las penas, acá hay que darles un destino a los 80 mil jóvenes que en Rosario no estudian ni trabajan. Otra cosa importante es profundizar una amplia reforma hacia el interior de la administración que tiene que ver con mejorar todos los sectores vinculados al ejercicio del poder de policía municipal. Hoy la gente exige orden y cumplimiento de las normas.

-Ni bien asumió empezó a caminar los barrios, ¿cuál fue el mejor consejo que le dieron los vecinos?

-En general siempre además de la demanda, el problema y la queja, uno también recepciona propuestas. La gente reconoce este diálogo cara a cara con los funcionarios que no sea acartonado ni protocolar y restablece de algún modo ese vínculo natural que debe existir entre gobernantes y gobernados.

-¿Usted haría lo mismo que el intendente de Córdoba y publicaría los celulares de los miembros de su gabinete?

-No, me parece que es una medida exagerada y no sirve ni aporta demasiado.

-¿Qué obras va a impulsar este año?

-Bueno, hay muchas que ya están en marcha. Algunas las lleva adelante el gobierno nacional como la reparación de la Circunvalación y los accesos viales, las obras en el aeropuerto que impulsa la provincia y a nivel municipal ya está en marcha la remodelación de Pellegrini y bulevar Oroño. Estamos licitando la reparación del acceso por ruta 34 a Ibarlucea y en los próximos meses vamos a licitar el acceso por la autopista a Santa Fe. También estamos por adjudicar la obra de continuación del nuevo Heca y la construcción de los centros de distrito noreste y centro. También estamos avanzando en el Programa Rosario Hábitat, cuando termine mi gestión lo vamos a concluir y vamos a tener urbanizado cerca del 40 por ciento de los asentamientos irregulares de la ciudad.

-¿La recaudación municipal está creciendo?

-Hemos ido mejorando la recaudación a partir de un gran esfuerzo por lograr una mayor eficiencia. Además, el mejoramiento de la situación económica general impacta en el municipio a través de la tasa de derecho de registro e inspección (Drei), aunque en menor medida que en la provincia y la Nación.

-¿Se está pensando en aumentar la tasa general de inmuebles (TGI)?

-Por el momento no.

-¿Pero no se descarta?

-Bueno, estamos en una economía inflacionaria, así que no podemos descartar el realizar un aumento mucho más adelante.

-El presidente subió lo sueldos de sus ministros, ¿piensa elevar los salarios de sus funcionarios?

-Mientras no podamos resolver aceptablemente la situación de tanta gente que en la ciudad gana 150 pesos o menos, no me parece oportuno hablar de aumentos a los funcionarios políticos.

-¿El nuevo Heca estará terminado antes de que culmine su gestión?

-Tengo toda la intención de poder inaugurarlo. Tenemos todos los recursos asegurados para concluir la obra civil y estamos gestionando la parte del equipamiento que nos falta. Así que creo que podremos abrirlo en el 2006.

-¿Cuando se licitará el transporte de colectivos?

-Estamos dándole los últimos retoques al pliego. La realidad del transporte es muy dinámica y muchas de sus variables dependen de factores que no manejamos a nivel local. Los subsidios nacionales y el precio de los combustibles modifican permanentemente las ecuaciones. De cualquier manera en no más de 10 o 15 días vamos a estar presentando el proyecto en el Concejo y a partir de allí esperamos un tratamiento bastante rápido porque ya está discutido y consensuado con los distintos bloques.

-¿En estos seis meses cree que la gente ve diferencias entre la gestión de Binner y la suya?

-Esto tendría que contestarlo la gente. Creo que evidentemente es una gestión distinta, aunque reconozco que hay una continuidad tanto en la política como en los lineamientos generales.

enviar nota por e-mail

contacto
buscador

Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
"Hay que darles un destino a los 80 mil jóvenes que en Rosario no estudian ni trabajan", aseveró Lifschitz.

Notas Relacionadas
Lifschitz cosecha respaldo, pero le exigen cumplir sus promesas


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados